27 de septiembre, 2018
La interacción con los perros de terapia demostró ser beneficiosa para los niños con trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), lo que conduce a mejores habilidades sociales, conductas prosociales y menos conductas problemáticas. Además, se lograron beneficios significativos luego de solo ocho semanas, mucho antes que los niños que no tuvieron acceso a los animales.