Los gatos persas, con su pelaje largo y suave y su dulce personalidad, son la raza de gatos más popular en los Estados Unidos, y lo han sido por más de 30 años.1 Así que no es de sorprenderse que el puesto número dos se destine a los gatos exóticos de pelo corto, primos de los persas.
Los gatos exóticos son como los persas excepto por una distinción, su pelaje. Mientras que la mayoría se enamora de la personalidad de los persas, no todos lo hacen de su largo pelaje difícil de mantener. Los gatos exóticos eliminan el problema de raíz, ya que tienen personalidades gentiles y cariñosas, y un pelaje corto y fácil de mantener.
Si usted está considerando agregar un exótico a su familia, Paw Nation ha recopilado algunos datos importantes (e interesantes), que usted debe saber.2
1. Tan Solo Llevan Alrededor de 50 Años
La raza exótica de pelo corto inició en la década de 1950 cuando los americanos de pelo corto fueron criados con los persas. Los gatos birmanos y rusos también fueron criados con los persas para obtener el gen de pelo corto.
2. Pueden Ser Extremos o Tradicionales
Los Exóticos Extremos tienen una apariencia muy distinta con caras planas, nariz pequeña y ojos grandes. Los Exóticos Tradicionales tienen caras menos planas y nariz ligeramente más larga.
3. Gastos de Bajo Mantenimiento
Las especies exóticas a veces son llamadas "el persa para el hombre perezoso" porque necesitan peinarse solamente una vez a la semana (mientras que los persas requieren aseo intensivo). Éstos tienen una capa densa que les da un aspecto esponjoso, pero aun así casi no tiran pelo.
4. Amor por Holgazanear
Si está buscando un gato que ame acurrucarse, los exóticos son los indicados. Ellos tienden a seguir a sus dueños por la casa y saltarán en su regazo tanto como sea posible.
5. Amantes de la Compañía
Los exóticos aman la compañía de los demás, ya sea de humanos o de otros gatos (incluso de perros). Si usted quiere más de una mascota, las especies exóticas, son una buena opción ya que tienden a llevarse bien con los demás. Los exóticos también son una buena opción para las personas que pasan mucho tiempo en casa... pero no para aquellos que pasan fuera la mayor parte del día.
6. Son Juguetones
Los persas son conocidos por ser perezosos, pero los exóticos disfrutan de jugar con juguetes. Mientras que siguen siendo gatos a los que les gusta estar acurrucados en su regazo, los exóticos también pueden ser bastante juguetones.
7. Garfield
Se piensa que la historieta del gato Garfield es un gato exótico de pelo corto, debido a su aspecto. Sin embargo, la mayoría de los exóticos son mucho más amigables y no perezosos como el gato de los dibujos animados.
8. Necesitan Tiempo Para Sentirse Cómodos con Gente Nueva
Los gatos exóticos son muy cariñosos con sus familiares, pero le huyen a los desconocidos. Si un exótico conoce a alguien nuevo, tomará un poco de tiempo para que se sienta cómodo alrededor de esa persona.
9. Una Raza de Gato Favorita
Como se mencionó, los exóticos son la segunda raza de gatos más popular en América, un título que han mantenido durante los últimos tres años.
Hay una serie de factores a considerar cuando se agrega un gato a la familia, pero si se ha enamorado de una raza específica, como un exótico, un criador no es su única opción. Hay refugios de gatos de raza pura ubicados en los Estados Unidos donde puede encontrar el exótico perfecto para su familia, a un costo mucho más bajo del que usted pagaría directamente con un criador.
Por ejemplo, en una organización de rescate de gatos de raza pura en el medio oeste tiene cargos por adopción de $150 y $300 dólares para gatos adultos y de $200 a $350 para gatitos. Un criador privado puede cobrar $1,600 dólares por un gatito de raza pura. Por supuesto que el precio no es el único factor a considerar en la adopción de una mascota, pero cuando adoptas desde una organización de rescate o un refugio usted tiene el beneficio adicional de ayudar a un gato que necesita un hogar.
Si quiere ver un gatito exótico en acción, vea el siguiente video, el cual muestra una bebe de 2 meses y medio jugando con su juguete favorito.