Un gato pinto o bicolor (piebald en inglés), tiene un abrigo o áreas grandes de pelo despigmentado (usualmente blanco), combinado con parches de cabello pigmentado (usualmente negro). El color de la piel bajo el pelaje blanco también esta despigmentado, y la piel bajo el pelaje más oscuro esta pigmentado. El patrón de color alternado es asimétrico.
El término en inglés "piebald" es una combinación de las palabras en inglés "pie" (que proviene de "magpie" que en español significa urraca), y "bald", esta última significa una mancha o parche blanco. Se refiere al plumaje distintivo blanco con negro de las urracas.
Además de los gatos, también hay otros animales con colores “piebald”, incluyendo a los caballos, perros, aves, cerdos, vacas e incluso algunas serpientes.
Los resultados de un estudio publicado recientemente sugieren que los científicos han descubierto la forma en la que las manchas piebald en los gatos blancos con negro se formaron durante la gestación.1
De acuerdo con el ScienceDaily:
"Los investigadores que indagaron la forma en la que se comportaban las células de pigmentación en los ratones descubrieron que se movían y multiplicaban al azar durante el desarrollo temprano, en vez de seguir instrucciones.
Sus hallazgos contradicen la teoría existente de que los patrones piebald se forman en el pelaje de los animales porque las células de pigmentación se mueven demasiado lento para llegar a todas partes del embrión antes de que se forme completamente".2
El profesor Ian Jackson de la Universidad de Edimburgo y su coautor del estudio ofrecen esta explicación:
"El gato blanco con negro tiene una mutación y se asumió que debido a que sabíamos que esas células se movían por la piel, era debido a que las células no se movían suficientemente rápido, pero lo que hemos demostrado es que en realidad las células se mueven más rápido en el gato negro con blanco o en el ratón bicolor.
El problema es que no hay suficientes, por lo que no se dividen lo suficiente, se dividen más lentamente. Siempre se imaginó que habría una señal que les indicaría a donde ir, pero ellas simplemente se mueven al azar.
Es como una dispersión -- si pones una gota de leche en una taza de café, la leche se dispersa en toda la taza de café. Eventualmente las células se esparcen por la piel".3
El modelo matemático utilizado por los científicos de las Universidades de Bath y Edimburgo podría tener una aplicación en otra investigación para rastrear diferentes células durante el desarrollo temprano. Los resultados del estudio podrían posiblemente aclarar las condiciones médicas que se desarrollan en el útero, por ejemplo, agujeros en el corazón.
Se ha debatido mucho el tema de si el color del pelaje del gato influye en su personalidad, y a lo largo de los años se han aportado muchas opiniones al respecto.
En un libro del año 1895 titulado The Cat, el autor R.S. Huidekoper escribió lo siguiente acerca de los gatos bicolores:
"Este gato más que cualquier otro, tiende a ser gordo e indolente, desgastado y penoso, como pudiera ser el caso. […]El gato Blanco con Negro es afectuoso y limpio, pero es un egoísta, y no es un animal con el que los niños pudieran jugar".4
Un estudio de Bavaria sugiere que los gatos blancos con negro tienden a vagar más lejos de sus hogares que los gatos con pelaje de otros colores. El estudio involucró un área geográfica grande, lo cual sugiere que la tendencia podría tender una base genética.5
De acuerdo con Sarah Hartwell de Messybeast, mientras que la mayoría de los reportes de los colores/personalidades de los gatos son anecdóticos, ha habido estudios en los que se les pidió a los dueños o veterinarios asociar colores particulares con rasgos particulares de personalidad.6
Los participantes del estudio reportaron que los Persas blancos con negro fueron "tranquilos", los Británicos de Pelo Corto blancos con negro fueron "apacibles y amigables", y las razas mixtas blancas con negro fueron "callejeros".
En 1973, en un libro de Alimentos Pedigree Para Mascotas llamado Guide to Cats & Kittens, el autor afirma que los Persas blancos con negro son "excelentes cazadores de ratas y ratones".7
A principios del siglo XXI, George Ware, dueño de un criadero Británico de gatos ofreció su propia teoría acerca de los colores y temperamentos. Basado en una experiencia personal, Ware sugirió que los gatos blancos con negro son:
"Verdaderos gatos falderos. Muy leales a su familia, especialmente a un miembro de la familia en particular. Culpables de ser caprichosos".8