Con el verano en pleno apogeo, muchos perros acalorados lo único que quieren es refrescarse en el agua. Y si cuentas con una alberca en el patio ¿que podría ser más tentador que eso? Además de disminuir la temperatura corporal de tu perro, la natación es un excelente ejercicio para los perros y sus humanos.
Sin embargo, a medida que cada vez más dueños de mascotas toman conciencia de los riesgos asociados con los productos químicos que utilizan alrededor de sus hogares y jardines, muchos propietarios de perros se preguntan si es seguro para Firulais chapotear en la alberca clorada.
Lo ideal es que los perros naden en cuerpos de agua naturales, como el mar o un lago de agua dulce, pero me doy cuenta de que esto no es una opción disponible para todos los dueños de perros.
Usos del Cloro
El cloro tiene una variedad de usos. Se utiliza para desinfectar el agua y es parte del proceso de saneamiento de aguas residuales y residuos industriales. El cloro se utiliza como agente blanqueador durante la producción de papel y tela. También, se utiliza en productos de limpieza, incluyendo el blanqueador de uso doméstico, que es cloro disuelto en agua.
Además, el cloro se utiliza para preparar cloruros, disolventes clorados, pesticidas, polímeros, cauchos sintéticos, y refrigerantes.
¿Cuáles Son los Peligros Que Enfrentan las Personas al Exponerse al Cloro?
No estoy al tanto de ningún estudio acerca de los efectos de exponerse al cloro en la salud de las mascotas; sin embargo, los efectos en la salud de los seres humanos están bien documentados. La gravedad de los signos y síntomas depende de la cantidad, fuente y duración de la exposición.
La mayoría de las exposiciones al cloro que tienen las personas ocurren a través de la inhalación.
Los bajos niveles de exposición al cloro en el aire provocan irritación ocular, cutánea y en las vías respiratorias, dolor de garganta y tos. Y aunque el cloro tiene un olor característico que sirve como una advertencia de su presencia, también provoca fatiga olfativa o adaptación (lo que significa que una vez que el olor está en la nariz, tienes menos capacidad para percibirlo).
Cuando hay altos niveles de exposición por inhalación, los síntomas pueden evolucionar a opresión en el pecho, jadeos, dificultad para respirar, broncoespasmo y edema pulmonar.
Consumir cloro disuelto en agua (por ejemplo, hipoclorito de sodio o blanqueador de uso doméstico) ocasiona quemaduras en los tejidos del tracto gastrointestinal (GI, por sus siglas en inglés).
El cloro causa bajo nivel de irritación en los ojos y la piel, y exponerse a niveles más altos puede ocasionar graves quemaduras químicas o ulceraciones.
Los niños podrían recibir una dosis mayor que los adultos expuestos a ambientes con los mismos niveles de gas de cloro, ya que tienen una mayor proporción de la superficie del área pulmonar con respecto al peso corporal, y una menor proporción volumen por minuto en relación al peso.
Además, los niños pueden estar expuestos a niveles más elevados que los adultos--aun si están en el mismo lugar--debido a que son más pequeños y los niveles más altos de gas de cloro se encuentran a nivel del suelo. Podemos suponer que esto también se aplica en las mascotas.
Otro problema con el cloro: Los científicos han descubierto que los derivados químicos que se forman cuando se mezclan materiales orgánicos con agua clorada son mucho más tóxicos de lo que nadie hubiera imaginado.
Por ejemplo, los subproductos de la desinfección (SPD o DBP por sus siglas en inglés) son más de 1 000 veces más tóxicos que el cloro en sí.
Los materiales orgánicos que reaccionan de forma cruzada con el cloro para formar los derivados de desinfección en las albercas, incluyen al pelo, piel, sudor seco, suciedad y la orina. Las lociones también pueden causar reacciones químicas perjudiciales.
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¿Cómo Lograr Que Tu Perro Tenga Un Menor Riesgo de Exposición al Cloro?
Ya que la natación es un ejercicio tan beneficioso para los perros que les gusta el agua, y debido a que actualmente muchos de ellos no hacen suficiente ejercicio, creo que si puedes hacer que tu alberca sea lo menos tóxica posible, obtendrás beneficios muy superiores a los riesgos al permitir que tu mascota tenga sesiones de natación.
Idealmente, puedes encontrar una manera sin utilizar cloro para mantener tu alberca limpia de bacterias, algas y otros organismos.
El bromo es una alternativa popular y más suave que el cloro, aunque es un primo cercano del mismo. Sin embargo, el bromo es más caro que el cloro y menos estable, cuando es expuesto a los rayos del sol.
El Dr. Mercola sugiere evitar el cloro por completo y en vez de este, hacer un mantenimiento con un tratamiento de choque cada 5 o 6 días, para destruirla acumulación de algas.
El tratamiento de choque se volatiliza en aproximadamente 24 a 48 horas y proporciona un rango de varios días, en los que puedes utilizar tu alberca sin ningún problema
También, sugiere disminuir la cantidad de materia orgánica que llevas a tu alberca, ya que esto a su vez reduce la cantidad de residuos de desinfección, al ducharse antes de nadar, y enseñarle a los niños a no orinar en el agua.
Para los perros, recomiendo un buen cepillado e incluso rociarlos rápidamente con la manguera para eliminar tanta caspa y pelo como te sea posible, antes de que se sumerjan en el agua.
Consejos Para Mantener a Tu Perro a Salvo en la Alberca
- Obviamente, si quieres asegurarte de que tu perro sabe nadar, y también dónde y cómo saldrá de la alberca. Al igual que los niños e incluso los adultos, los perros pueden llegar a cansarse o entrar en pánico, y entrar en riesgo de ahogarse.
- Disuade a tu perro de no beber agua de la alberca, ya que el cloro puede ocasionarle irritación gastrointestinal, y además existe la posibilidad de que tenga una intoxicación por agua. Pon especial atención cuando los perros chapotean en el agua con la boca abierta o tragan agua mientras nadan. Afortunadamente, los síntomas gastrointestinales por beber agua clorada generalmente no tienen tanta importancia, pero es mejor no tentar a la suerte.
- Supervisa a tu perro durante el tiempo que este sumergido en la alberca. Él necesitará que le recuerdes no beber el agua, y al mantener una estrecha vigilancia en él sabrás si sus ojos enrojecen un poco, o si tose, o se agota.
- Continuar haciendo sesiones de natación relativamente cortas es una buena idea, ya que estar durante un tiempo prolongado en el agua clorada puede causar irritación ocular y cutánea en los perros que son sensibles. Y si la alberca tiene un alto nivel de cloro, también puede irritar las vías respiratorias de tu mascota.
- Después de cada sesión de natación, enjuaga (o ponle champú y enjuaga) a tu perro minuciosamente para eliminar los residuos del cloro de su pelaje y piel. Si tiene orejas largas o es propenso a infecciones auditivas, asegúrate de secar cuidadosamente sus orejas con la toalla.
- Asegúrate de guardar tu suministro de cloro en su envase original y en un lugar al que tu perro no pueda acceder.
- Si tu perro nada muy frecuentemente, al igual que los míos, te recomiendo realizar un protocolo de desintoxicación periódica. Yo uso NAC (N-acetil cisteína) y el cardo lechero durante una semana todos los meses durante la temporada de verano, para ayudarle a sus mecanismos de desintoxicación sistémicos.