Probablemente Aplicas Esto en Ti, Pero lo Omites en Tu Mascota

Segunda Opinión Veterinaria

Historia en Breve

  • A los dueños de mascotas no se les ocurre buscar una segunda opinión en veterinarios
  • Las situaciones en las que sería más prudente consultar a otro veterinario pueden ser cuando tu mascota reciba un mal diagnóstico, si tu mascota no mejora después de su tratamiento, o cuando se recomienda un procedimiento muy invasivo o caro
  • Otra razón para buscar una segunda opinión puede ser cuando la filosofía del consultorio de tu veterinario no coincide con la visión que tiene sobre qué tipo de cuidados que debe recibir tu mascota

No hace falta decir que la atención veterinaria que tu familiar peludo recibe es un factor muy importante para mantener su buena salud y calidad de vida.

Pero mientras muchas personas suelen buscar una segunda opinión médica cuando se trata de su propia salud o la salud de un miembro (humano) de la familia, a los dueños no se les ocurre buscar una segunda opinión veterinaria cuando ésta podría estar justificada.

De hecho, yo les sugiero a los dueños de mascotas que armen un equipo de veterinarios que le ayuden a su compañero animal a tener un estilo de vida saludable. Creo que sería una gran idea juntar a, digamos, un veterinario holístico, un nutriólogo de mascotas y/o un quiropráctico animal para ayudar a tu mascota a tener una vida larga y saludable.

Si tienes a tu propio equipo de veterinarios expertos para consultar, puedes obtener una segunda opinión de alguien a quién conozcas y en quién confíes, que también esté familiarizado con tu mascota.

Dicho esto, existen un número de situaciones en las que tal vez te gustaría tener una segunda opinión para tu mascota.

9 Razones Para Buscar una Segunda Opinión de un Veterinario

PetMD tiene una lista de cuatro situaciones en las que tal vez podrías considerar una segunda opinión para tu mascota:1

1. Se te dio un mal diagnóstico. Si tu mascota ha sido diagnosticada con una enfermedad grave y te dijeron que el pronóstico de recuperación es malo, es una muy buena idea buscar una segunda opinión de otro veterinario o un veterinario especialista.

Es posible que otro veterinario tenga más experiencia con la enfermedad de tu mascota o más herramientas en su repertorio que el primer veterinario.

2. Se te recomienda un tratamiento complicado o caro. El tratamiento estándar para algunas enfermedades, por ejemplo, cáncer o problemas ortopédicos, suele ser complicado, invasivo y caro.

Un especialista, como podría ser un oncólogo veterinario o un cirujano de tejidos suaves, puede ofrecer un tratamiento más enfocado y menos caro.

3. Es tu primera experiencia con el veterinario. Si un veterinario nuevo ve a tu mascota y recibes un diagnóstico o plan de tratamiento preocupante, es una buena idea buscar una segunda opinión que te ayude a calmarte de que lo que aprendiste con el nuevo veterinario es (esperemos) correcto.

4. Tu instinto te dice otra cosa. Al ser la persona que conoce a tu mascota mejor que cualquiera, si estás seguro de que tiene un problema de salud, pero el veterinario no puede encontrar nada, puede ser una buena idea buscar una segunda opinión veterinaria.

A estas cuatro, yo les añadiría cinco razones adicionales para buscar una segunda opinión (y/o un nuevo veterinario):

5. Si tu veterinario es un vacunador casual. La gran mayoría de los veterinarios tradicionales recomiendan programar revacunaciones anuales o cada tres años para perros y gatos. Muchos también abogan por varias de las vacunas no esenciales, que suelen desatar reacciones más adversas que las vacunas esenciales.

En mi experiencia, los vacunadores casuales también tienden a ignorar o restar importancia a las reacciones adversas potenciales, así que, si tu mascota se enferma después de ser vacunada, no es muy probable que un veterinario tradicional haga la conexión.

Si tu veterinario te está recomendando revacunaciones anuales de las vacunas esenciales, o si te sugiere las vacunas no esenciales sin explicar los riesgos individuales de tu mascota de adquirir una enfermedad particular, o la eficacia de la vacuna, o la reacción adversa potencial, te recomiendo buscar una segunda opinión con un veterinario que esté más informado sobre vacunas y que sea más precavido al aplicarlas.

6. Si tu veterinario no te ofrece pruebas de anticuerpos. Las pruebas de anticuerpos miden la inmunidad de tu mascota a las enfermedades contra las que ha sido vacunada en el pasado. Cualquier resultado positivo medible significa que tu compañero animal está protegido.

Las pruebas de anticuerpos no se ofrecen muy seguidas en clínicas veterinarias convencionales, y cuando sí están disponibles, su costo suele ser excesivo, especialmente cuando se compara con el costo de revacunación.

Si tu veterinario no ofrece pruebas de anticuerpos, o cobra más de 100 dólares por una prueba de anticuerpos de moquillo y parvovirus, te recomiendo buscar otro veterinario. Todos los veterinarios holísticos prefieren hacer una prueba de anticuerpos antes de revacunar automáticamente en contra de enfermedades comunes. La excepción es la rabia, que es la única vacuna requerida por ley en todos los Estados Unidos.

7. Si tu veterinario te receta múltiples rondas de antibióticos y/o una terapia de esteroides. Desafortunadamente, muchos veterinarios tradicionales prescriben antibióticos y corticosteroides (por ejemplo, prednisona) como si fueran caramelos.

En ciertas situaciones estas medicinas son necesarias y benéficas, pero tristemente se sobre utilizan y se abusa de ellas en la medicina veterinaria.

Si tu veterinario parece creer que estos medicamentos son la respuesta para todo, especialmente si se utilizan únicamente para calmar los síntomas de tu mascota, te recomiendo buscar una segunda opinión de un veterinario que identifique y resuelva la raíz del problema que está causando estos síntomas.

8. Si tu veterinario cree que tu perro o gato debería ser alimentado con comida procesada. En las escuelas de veterinaria se pone muy poco énfasis en enseñar la nutrición animal, lo que significa que la mayoría de los graduados de veterinaria tiene solo la información que les han otorgado las compañías de comida para mascotas.

A menos que tu veterinario haya hecho su propia investigación de nutrición, lo más probable es que quiera que te alejes de las dietas de comida cruda o comida fresca y que te recomiende mejor la cosa procesada que viene en una bolsa o lata.

También te puede vender lo que te está recomendando, ya que las compañías de comida para mascotas suelen ofrecer incentivos a los veterinarios para que vendan sus productos.

Si estás buscando un guía informativa sobre la mejor alimentación para tu perro o gato y tu veterinario sigue abogando por la comida para mascotas procesada, te recomiendo buscar un veterinario holístico que te pueda ayudar a formular una dieta balanceada nutricionalmente, apropiada para su especie, y de excelente calidad para el miembro de tu familia de cuatro patas.

9. Tu mascota no está mejorando. La mayoría de las mascotas que trato llegan a mí porque han ido a su veterinario varias veces (o varios veterinarios muchas veces) y no están mejorando. En algunos casos están empeorando a pesar de tener un tratamiento en curso.

Si tu mascota no está mejorando o sigue empeorando a pesar de su tratamiento, es momento de probar otra cosa. Me he fijado que la escala en la que los veterinarios están determinados a curar a tus mascotas varía de súper comprometido (lo que significa que van a investigar sobre nuevos tratamientos y mandar casos a sus colegas más experimentados, en caso de ser necesario) a imparcial y desapasionado (algunas veces re-recetando medicamentos que son claramente inefectivos).

Si te sientes frustrado con lo que te está recomendando tu veterinario, esa es tu señal para buscar un tratamiento en otro lado. Esto no significa que no puedas regresar a este veterinario después, sino que simplemente tu mascota no debería seguir sufriendo innecesariamente.

Estas son únicamente algunas situaciones en las que tal vez deberías buscar una segunda opinión para tu mascota, o un veterinario que la filosofía de su clínica esté más alineada con tus propias ideas acerca de la mejor manera de cuidar a tu compañero animal.

No siempre es fácil o cómodo “tranquilizarse” al obtener una segunda opinión o dejar un consultorio veterinario al que has ido por años, pero como el principal curador y abogado de tu mascota, a veces es definitivamente lo mejor que puedes hacer por tu compañerito peludo.

Publicidad
Clic aquí para aprende másClic aquí para aprende más

+ Fuentes y Referencias
Haga clic aquí y sea el primero en comentar sobre este artículo
Publique su comentario