Hoy en día, muchas mascotas sufren del problema de acumulación de sarro en los dientes. Por fortuna, cada vez más dueños de mascotas se están dando cuenta del problema y desean saber cómo mantener los dientes de su compañero peludo en buenas condiciones.
El sarro es la placa que se ha endurecido sobre los dientes. Irrita las encías, que al inflamarse causan una enfermedad conocida como gingivitis.
El sarro también puede acumularse debajo de las encías, lo que provocará que los dientes se despeguen. Esto crea pequeñas bolsas en el tejido de las encías que atraen a las bacterias. El resultado es una enfermedad periodontal irreversible que es dolorosa para el animal y puede causar abscesos, infecciones, pérdida ósea y dental.
Por supuesto que el mejor enfoque para que tu mascota tenga una buena salud oral es controlar de forma proactiva la placa y el sarro que se acumula en sus dientes.
Cómo controlar la acumulación de sarro
La alimentación puede desempeñar un papel muy importante en el desarrollo de sarro en los dientes de tu mascota. Los perros silvestres tienen dientes fuertes y sanos, en parte porque comen huesos carnosos crudos.
Las dietas crudas—incluso los alimentos crudos preparados, molidos—ayudan a controlar el sarro. El hueso molido crudo es un abrasivo dental que actúa como una fina lija cuando se mastica, lo que ayuda a eliminar todos los residuos que hay en los dientes. La carne contiene enzimas naturales y además, a diferencia de las croquetas almidonadas, el alimento crudo no se atora en los dientes.
El alimento deshidratado para mascotas es comercializado como apoyo para mantener sus dientes limpios, pero tal cosa es un mito. Creer que las croquetas beneficiarán la salud oral de tu mascota es como creer que los alimentos crujientes para humanos beneficiarán tu salud oral.
Jamás se te ocurriría comer un puñado de cacahuates crujientes para tratar de eliminar la placa y sarro de tus dientes. ¡La idea de que el alimento deshidratado ayuda a mantener limpios los dientes de tu mascota es igual de absurda!
Para los perros y gatos, la acción de masticar también desempeña un papel importante en la eliminación de placa y sarro de los dientes. A pesar de que hay muchos juguetes y productos alimenticios en el mercado que pueden ser de ayuda (siempre y cuando tu mascota los mastique), los huesos crudos son la mejor opción y les gustan a casi todos los perros.
Es importante que los huesos estén crudos, porque los huesos cocidos pueden tener astillas y causar daños graves en el tracto gastrointestinal de tu mascota. El tamaño del hueso depende del tamaño de tu mascota, así como de su actitud, es decir, si es una ávida masticadora, por lo que corre el riesgo de lesionarse o romperse los dientes.
Siempre debes supervisar a tu perro cuando le des un hueso con el fin de minimizar el riesgo de daño dental y los huesos crudos deben refrigerarse entre cada sesión de masticación.
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Ciertas mascotas tienen predisposición a la acumulación excesiva de sarro
Sin embargo, a pesar de que algunas mascotas llevan una dieta cruda y también mastican huesos crudos, tienen el problema de acumulación de sarro en sus dientes. Las razas braquicefálicas (nariz corta) y miniatura tienen predisposición porque sus dientes no tienen una alineación normal y en el caso de los perros pequeños, está el problema del amontonamiento.
Sin importar cuántos huesos mastiquen estos perros, esto no los ayudará a eliminar ni la placa, ni el sarro de sus dientes.
Las mascotas con problemas de salud crónicos también parecen acumular más sarro en sus dientes. Esto podría deberse a que su masticado es menos vigoroso, o bien podría ser el resultado de cambios en la cantidad de saliva, salud de las encías, pH en el hocico, entre otras causas.
Muchos gatos también tienen predisposición a la acumulación de sarro en los dientes y los gatitos pueden presentar un desafío especial porque no roen los huesos como los perros. Si tienes un gato, puedes ofrecerle cuello de pollo sin piel para que se motive a masticar más y proporcionarle la abrasión mecánica suficiente para mantener sus dientes libres de placa.
La mejor manera de asegurarte de que tu mascota tenga una buena salud oral es cepillando sus dientes todos los días
Con paciencia y persistencia, la mayoría de los dueños pueden enseñarle a su perro o gato a dejarse cepillar los dientes todos los días, que es la manera ideal de asegurarse de que el sarro no se acumule en los dientes de su mascota.
Uno de los secretos de un cepillado dental exitoso es ir poco a poco para permitir que tu mascota se adapte a este proceso pero a su propio ritmo. Antes de utilizar el cepillo de dientes, utiliza tu dedo para que tu mascota comience a familiarizarse con tener tu dedo dentro de su hocico.
Frota suavemente los dientes frontales y ve lentamente hacia los dientes posteriores. Repite este paso con los dientes inferiores. Durante este proceso debes elogiar a tu mascota y hacer que las sesiones sean cortas.
Una vez que tu mascota se sienta cómoda con la presencia de tu dedo en su hocico, envuelve la yema de tu dedo con un pequeño paño húmedo muy delgado o gasa y comienza a frotar sus dientes. Te sorprenderá la cantidad de suciedad que limpiarás con ese pequeño pedazo de gasa.
El siguiente paso es utilizar un producto de limpieza dental natural y seguro diseñado especialmente para mascotas y aplicar una pequeña cantidad a la gasa antes de frotar sus dientes. Cuando tu mascota se acostumbre a esto, puedes cambiar tu dedo por un cepillo de dientes suave que sea del tamaño adecuado para el hocico de tu perro o gato.
Si tu mascota se resiste por completo a que le froten o cepillen los dientes, entonces hay otros productos disponibles que pueden aplicarse en los dientes para eliminar la placa y sarro sin tener que cepillarlos. Sin embargo, mientras más frotes o cepilles sus dientes, obtendrás resultados más rápido y será más fácil mantener una salud oral en tu mascota.
En algunas mascotas, las limpiezas dentales profesionales son inevitables
Si estás al pendiente del cuidado dental de tu mascota y no tiene ningún tipo de situación especial que la predisponga a la acumulación de sarro o cualquier otro problema dental, es posible que nunca necesite de una limpieza profesional por parte de un veterinario.
Sin embargo, las mascotas con acumulación extrema de sarro, encías muy inflamadas o infecciones orales, necesitan de un poco de ayuda extra. Las radiografías dentales digitales solo pueden tomarse en mascotas sedadas y está de más decir que las extracciones dentales deben realizarse bajo anestesia.
Los procedimientos dentales realizados en dientes y encías inflamados o infectados son muy dolorosos para el animal, por esta razón la anestesia y el control del dolor son necesarios.
A pesar de la popularidad de la limpieza dental sin anestesia (también llamado raspado dental o NPDS por sus siglas en inglés), este procedimiento tiene una aplicación limitada y los resultados pueden ser engañosos para un dueño que no entiende la mayoría de los problemas graves que puede haber en el hocico de su mascota y que por lo general ocurren por debajo de la línea de las encías.
Además, desde el 1 de noviembre de 2013, la Asociación Americana de Hospitales Veterinarios (AAHA por sus siglas en inglés), exigió a todas las clínicas veterinarias acreditadas a anestesiar e intubar a los pacientes para procedimientos dentales.
Con todo lo dicho, hay situaciones en las que puede ser totalmente apropiado que un veterinario calificado realice un raspado dental en tu mascota-por ejemplo, si en casa practicas un buen cuidado oral, si llevas a tu mascota a chequeos veterinarios regulares o si tu perro o gato solo tiene un poco de sarro.
En mi clínica, quito la placa y el sarro de los dientes de las mascotas sin el uso de anestesia. Pero solo lo hago de esta manera con las mascotas de las que tengo su historial dental y no lo hago en lugar de un minucioso examen dental.
Pero si por ejemplo, tengo un paciente con un gran trozo de sarro que le está causando irritación, lo elimino sin el uso de anestesia, siempre y cuando pueda hacerlo fácilmente y sin estresar al paciente.