La mayoría de los dueños de mascotas reconocen que cuando cambia la conducta alimentaria de un gato (o un perro), puede ser por la presencia de problemas. Es un hecho que lo que ingiere y expulsa es un indicador central tanto de la salud física como del comportamiento.
Cuando cambian los hábitos alimenticios de una mascota, es importante investigar la causa. Específicamente, un cambio en los patrones de alimentación de los gatos, ya sea mayor o menor consumo de alimentos, a menudo tiene una causa conductual o ambiental, en lugar de una médica.
La anorexia de más de un día se considera una emergencia médica
Cuando el problema es la falta de apetito de un gato, existen tres formas diferentes que puede adoptar:
- La anorexia es una falta total de consumo de alimentos. No existe la anorexia parcial.
- La hiporexia es una disminución en el consumo de alimentos, independientemente del motivo o la causa.
- La disrexia es la modificación del apetito normal o de los patrones de alimentación. Por ejemplo, un gato que se niega a comer como lo hace regularmente, pero consume la comida del perro.
Los gatos no pueden pasar mucho tiempo sin comer debido al riesgo de lipidosis hepática felina o enfermedad del hígado graso. Es por esto que si tu gatito se niega a comer durante más de un día, en especial si presenta otros síntomas o si consume menos alimentos, es importante que consultes de inmediato a tu veterinario. Si esta pérdida de apetito es gradual, es muy importante que lo revisen, pero no es una situación tan urgente como cuando es un cambio drástico y repentino.
Y con respecto al tratamiento para un gato que no come, no existe ningún enfoque único que se aplique en todos los casos. Tu veterinario debe realizar un examen físico completo, un diagnóstico e investigar cambios metabólicos como hipertensión, niveles de potasio en la sangre, anemia o vómitos. También debes considerar cualquier medicamento o suplemento que tu mascota esté tomando para descartarlos como causa.
La causa de la falta de interés de tu gato por los alimentos, determinará el tratamiento adecuado. Si existe un trastorno subyacente que se puede tratar o controlar con éxito, el apetito de tu mascota debería mejorar a medida que se soluciona la afección.
La ansiedad puede provocar los cambios en los hábitos alimentarios de los gatos
Si tu gato come menos comida de lo normal (hiporexia) o demuestra comportamientos diferentes o extraños en cuanto a la alimentación (disrexia), es importante investigar las posibles razones médicas del cambio y las causas ambientales o de comportamiento.
De acuerdo con la Dra. Sarah Heath, veterinaria propietaria de Behavioral Referrals Veterinary Practice en Chester, Inglaterra, la ansiedad a veces causa los patrones de alimentación anormales como la hiporexia, anorexia y la alimentación en exceso, incluso en un gato que no demuestra ningún otro signo de estrés.
Heath cree que reconocer los comportamientos relacionados con la comida de los felinos es un primer paso importante, porque con frecuencia, los comportamientos alimentarios anormales son el resultado de una mala comunicación o malentendidos entre los gatos y sus dueños.
Un ejemplo de uno de esos malentendidos es que: "Los gatos están diseñados fisiológicamente para consumir pequeñas cantidades de comida varias veces al día", dice Heath, lo que sorprende a muchos dueños de mascotas que asumen que es normal (o debería ser normal) que un gato lama el recipiente dos veces al día a las horas prescritas de la comida.
Sin embargo, el comportamiento natural de alimentación de los felinos es comer algunos bocados, alejarse y regresar más tarde para comer un poco más. "El sistema digestivo felino solamente digiere la mitad de lo que se come en una visita al comedero", explica Heath. Cuando el dueño de una mascota no reconoce este hecho, podría asumir que el gatito está enfermo o que no le gusta la comida que le ofrecen. De acuerdo con la Dra. Heath, muchos gatos son etiquetados de manera injusta como "comedores quisquillosos".
Algunos dueños de los llamados "comedores quisquillosos" deciden involucrarse más a la hora de comer y animan a su gato a hacerlo. Debido que a los gatos les gusta cenar solos e interactuar con sus humanos en sus propios términos, este enfoque puede ser contraproducente, lo que hace que el gato desarrolle una relación negativa con la comida y más "irritabilidad". Por otro lado, algunos gatitos al responder a esta presión comen en exceso y después presentan problemas de obesidad.
Publicidad
![Clic aquí para aprende más]()
![Clic aquí para aprende más]()
Mesa para uno, por favor
Muchos dueños de mascotas no solo esperan que sus gatitos limpien sus tazones a una hora determinada todos los días, sino que, en hogares con varios gatos, a menudo esperan que todos coman juntos en el mismo lugar. Sin embargo, los felinos son comensales solitarios, incluso aquellos que se llevan bien con otros gatos en el hogar.
De acuerdo con la Dra. Heath, algunos gatos pueden volverse hiporéxicos (mostrar menos apetito) en respuesta al estrés relacionado con verse obligados a comer en un entorno grupal. La situación crea tensión, pero el gato reprime su estrés para conseguir comida. La frustración que siente se podría manifestar en otras ocasiones y también puede provocar una relación negativa con la comida.
Lo contrario puede ocurrir en los gatos que temen que el comedero desaparezca o que otros gatos se coman toda la comida. En este caso, la respuesta puede ser comer en exceso, lo que puede provocar regurgitación y obesidad a largo plazo.
Otra consideración es que no es natural que los gatos coman todas las comidas en el mismo lugar. En la naturaleza, esto haría que su comportamiento fuera muy predecible y llamaría la atención de los depredadores.
5 sugerencias para que tu gato disfrute de una comida sin estrés
En pocas palabras, "La pérdida de peso y la obesidad son procesos patológicos que pueden influir por factores conductuales y dietéticos", dice Heath, quien ofrece varios pasos simples que los padres de mascotas pueden tomar y que pueden ayudar a promover un ambiente emocional más saludable para los gatos de la familia.
- Pesa o mide la comida y ofrécela de diversas formas para que tu gato tenga más control sobre su entorno. Cuando sea posible, proporciónale comidas más pequeñas y frecuentes durante el día, en lugar de dos comidas fuertes. Utiliza un rompecabezas de comida, comederos de caza para uso en interiores (mis favoritos) u otros métodos novedosos que lo animen a buscar comida y quemar calorías en el proceso.
- En un hogar con varios gatos, te recomiendo alimentarlos por separado. Establece muchos lugares de alimentación que brinden acceso solitario a los alimentos. Los rompecabezas de comida, comederos de caza y los tazones o platillos regulares que contienen pequeñas cantidades de comida se pueden colocar en diferentes lugares de la casa para ayudar a satisfacer el deseo felino natural de cenar en diferentes lugares. También alienta a tus gatos a pasar tiempo buscando comida y permiteles tener el control de su consumo de alimentos.
- Si es posible, alimenta a su gatito desde un lugar elevado, ya que los gatos tienden a sentirse más seguros en lugares altos donde pueden ver lo que sucede a su alrededor. La comida se puede colocar en plataformas elevadas, en escondites o en torres para gatos que lo animan a saltar hacia ella. Estas plataformas deben ser lo suficientemente grandes para un gato.
- Trata de colocar la comida de tu gato en áreas con mínima actividad humana y lejos de ruidos fuertes y amenazas visuales (por ejemplo, una ventana donde tu gatito pueda ver a otro gato afuera). También puedes calentar la comida un poco para que sea más atractiva.
- En especial si tu gato tiene sobrepeso, coloca la comida en lugares donde tenga que escalar y reserva un tiempo para jugar con él todos los días, lo que le ayudará a perder peso y le proporcionará estimulación mental.
Artículos adicionales