Cuando los perros ven que llega su humano favorito, o escuchan la pregunta "¿Te gustaría un regalo?", a veces demuestran una excitabilidad similar a la que ves en los niños pequeños. Es una felicidad exagerada que algunos podrían describir como "locura", pero recientemente se acuñó un nuevo término y encaja bastante bien: "zoomies".
A veces, los perros son dominados por la emoción sin razón aparente, corren en círculos o de un lado a otro y se detienen abruptamente para mirarte con curiosidad antes de volver a correr. Aunque es bastante divertido, puede ser un poco peligroso sobre todo si el perro es muy grande o si están en el comedor donde hay artículos de porcelana.
Está bien si estás en casa y te divierte ver que tu cachorro corre por pura emoción, choca contra muebles o usa sofás, mesas, lámparas y cualquier otra cosa como trampolín. Pero ese comportamiento no se ve bien cuando llegan los invitados, o cuando llevas a tu perro a visitar la casa de otra persona (convivencia social).
Algunos padres de mascotas creen que es porque el perro es joven o está entusiasmado con un evento, incluidas las visitas inesperadas, pero si no tienes idea porque, no estás solo. Muchas personas se preguntan por qué sucede, especialmente si has intentado detenerlo varias veces. ¿Son normales estas explosiones de excitabilidad, por muy cortas que sean? El autor y experto en emociones animales, Marc Bekoff, comenta:
"Estoy sorprendido de cómo pocos zoomies se convierten en algo malo o perjudicial. Cuando le pregunté a los humanos del parque de perros sobre esto, todos acordaron que muy pocos causaron daño a un perro, a otros perros o a los humanos histéricos que, en algunas ocasiones, se ríen tan fuerte que lloran".
The Zoomies: hay un nombre (científico) para eso
Es posible que hayas visto a los niños alegrarse un poco justo antes de acostarse. No solo cuando quieren otro vaso de agua o cuando piden que les lean otro libro, sino la tontería animada que puede surgir cuando se cansan. Dependiendo de su edad, es posible que no puedan controlar su entusiasmo, razón por la cual tú como padre; puedes ayudar a guiarlos a un pasatiempo un poco menos agotador. Como observa BarkPost:
"Los zoomies son totalmente normales y, en las circunstancias correctas, pueden ser entretenidos (¡¿a quién no le encanta ver a un perro correr por el patio trasero?!). Pero puede haber ocasiones en las que los zoomies no sean convenientes (¡como a la hora de acostarse!) y solo quieras calmar a tu perro".
Zoomies es solo un nombre descriptivo, pero resulta que hay un término técnico para este comportamiento: períodos aleatorios de actividad frenética, también conocidos como FRAP. La explosión de energía que exhiben los perros dura solo unos minutos, pero puede ocurrir en cualquier momento, ya sea que tu perro esté emocionado o relajado.
Según Patrick Mahaney, un veterinario con sede en Los Ángeles, todos y cada uno de los perros pueden demostrar FRAP, pero sorprendentemente, los cachorros muy jóvenes no demuestran de esta manera su personalidad tan a menudo como lo hacen los perros mayores, ya que sus cuerpos no se han desarrollado lo suficiente como para ejercer tanta energía. De hecho, si los perros adultos están sanos y felices, pueden hacer este comportamiento en cualquier momento.
Los expertos en animales no están 100 % seguros de por qué los perros hacen zoomies, pero es posible que sea una oleada de energía acumulada. Los humanos también lo experimentan. Normalmente, los adultos saben cómo moderar cuando una burbuja de emociones amenaza con aparecer, por ejemplo, durante una boda, en el trabajo o en algún otro momento inoportuno. Es algo bueno cuando los perros experimentan una repentina oleada de convivencia.
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¿Está bien que los perros exhiban el comportamiento FRAP de forma frecuente?
¿Está bien que ocurran las oleadas de energía en los perros? En una sola palabra, sí. Bekoff señala que siempre vigiles a tu perro y que esté en un lugar seguro, como dentro de una habitación grande, en un parque u otra área segura. También es importante conocer a tu perro y permanecer alerta cuando este bajo la influencia momentánea del comportamiento zoomie, especialmente si hay otros perros o personas alrededor.
De hecho, agrega Bekoff, que el comportamiento FRAP puede ser contagioso. Los perros que observan a otros perros en medio de tal entusiasmo no pueden evitar unirse. Además, cualquier perro puede experimentarlos, sin importar su edad, tamaño o raza. Los zoomies son normales. De hecho:
"No hay nada de qué preocuparse. ¡Es todo lo contrario! Estas explosiones de energía son una señal de que tu perro está feliz y saludable. ¡Tu perro no va a correr como un cachorro loco si se siente triste o la pasa mal!"
Qué hacer cuando tu perro tiene los zoomies
Aunque puede ser entretenido ver a tu perro experimentar la alegría de estar vivo y dejar todo por el "periodo aleatorio de actividad frenética", incluso si corre sin un destino real en la mente, habrá momentos en que no sea conveniente ni apropiado.
Entonces, ¿Qué se puedes hacer? No lo regañes, él solo quema el exceso de energía y no sabe qué hacer con él. Si crees que podría ser por tratar de lidiar con el estrés, hay algunas acciones positivas que puedes tomar.
Si notas que tu perro recibe los zoomies en ciertos momentos del día, por ejemplo, cada vez que lo llevas a una cita de juego con otro perro, o puedes leer en su comunicación tácita que los zoomies son inminentes, debes mantenerlo alejado de escaleras o cualquier área elevada, así como evitar superficies resbaladizas como pisos de madera, sobre las cuales pueden deslizarse e ir más allá de lo que esperaba. Los lugares cubiertos de hierba son más seguros.
Si estás con tu perro en áreas cercanas a una carretera y le dan zoomies, no lo persigas. Es probable que tu perro piense que te unes a su juego y, que, como resultado, corra más rápido. Intenta convencer al perro con una golosina o un juguete y, si todo lo demás falla, corre en la dirección opuesta, así podría perseguirte. Tan pronto como puedas, ponle la correa para llevarlo contigo.
Una dosis diaria de ejercicio riguroso a primera hora de la mañana es una de las mejores formas que encontré para ayudar a frenar la frecuencia de los arrebatos energéticos. De hecho, he podido moderar la duración y la intensidad de los arrebatos de perros sanos que viven con padres geriátricos al diseñar rutinas matutinas que incluyen nadadas rigurosas, sesiones en la cinta o 20 minutos de ejercicios intensos de recuperación. Incluso una caminata muy larga puede reducir la cantidad de energía acumulada que los perros sanos llevan.
Si tu perro todavía tiene el deseo de mover su cuerpo después de una intensa sesión de ejercicio, puedes intentar reproducir música relajante, según un estudio del Reino Unido, se ha demostrado que puede ayudar a relajar lo suficiente a tu cachorro tanto como para quedarse sin fuerzas, ya sea que experimente estrés o presente un caso de zoomie. Lo principal es, no preocuparse. Los zoomies son normales y demuestran que tu cachorro está feliz y lleno de energía. Y eso, sin duda, también te hará feliz.