De acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer (NCI por sus siglas en inglés), los cinco principales tipos de cáncer en las personas son el cáncer de mama en las mujeres, el de próstata en hombres, seguido por el de pulmón, colon o recto, y el melanoma en ambos sexos.1
Cuando se trata de nuestras mascotas, no existe ninguna organización a nivel nacional que registre la aparición del cáncer. Sabemos que muchos cánceres humanos no son frecuentes en mascotas, pero si hay otros cánceres que adquirimos en común, incluyendo el de mama (glándulas mamarias), linfoma, cáncer de piel que toma la forma de tumores mastocitos en mascotas, y el cáncer de hueso.
Cáncer en las glándulas mamarias. El cáncer en las glándulas mamarias o cáncer de mama es común tanto en perros como en gatos. Es el tumor más común encontrado en perras y el tercero más común en gatos.
Uno de los supuestos beneficios más pregonados de la esterilización temprana de los animales hembra es un menor riesgo de contraer cáncer en las glándulas mamarias. Sin embargo, un estudio publicado en 2012 en el Journal of Small Animal Practice encontró que no existe evidencia suficiente de que la esterilización a cualquier edad reduzca el riesgo de cáncer mamario.2
Linfoma. El linfoma es un cáncer incurable del sistema linfático, que es parte del sistema inmunológico. Uno de cada tres diagnósticos de cáncer en los gatos es linfoma, más a menudo del tracto gastrointestinal. Los perros también desarrollan linfoma.
Para evitar contribuir al riesgo de linfoma en tu perro o gato, asegúrate que tu mascota no esté expuesta al humo del cigarro o a pesticidas del césped, especialmente los aplicados por empresas profesionales del mantenimiento del césped.
Tumor de mastocitos. El tipo más común de cáncer de piel en mascotas es el tumor de mastocitos. El tumor de mastocitos es mucho más frecuente en perros que en gatos. En los gatos; los tumores de mastocitos se ven con mayor frecuencia en la cabeza o el cuello, pero pueden presentarse en cualquier parte del cuerpo.
Los gatos con estos tumores generalmente son de mediana edad o mayores. Desafortunadamente, los gatitos con tumores mastocitos en el interior de sus cuerpos—normalmente en el tracto gastrointestinal o el bazo—tienen un mal pronóstico que cuando los tumores se presentan en la piel.
En los perros; los tumores mastocitos se encuentran con mayor frecuencia en el tronco, las extremidades, y en medio de los dedos de los pies. El pronóstico depende de la localización del tumor, el tamaño del tumor, el grado, y el tipo de tratamiento dado.
Los tumores mastocitos de la piel son muy diferentes en perros que en gatos. La cirugía para extirpar el tumor es menos invasiva en los gatos y el pronóstico para un recuperación completa es mucho mejor en gatos que en perros.
Los tumores de mastocitos generalmente con mal pronóstico son aquellos en el músculo, alrededor del hocico o en órganos internos, en el torrente sanguíneo o médula ósea, y en tumores ulcerados. Los mastocitos que causan ulceración en el tracto gastrointestinal, o son grandes y de rápido crecimiento, o son recurrentes, también suelen tener un mal pronóstico.
El Cáncer de hueso (osteosarcoma). El osteosarcoma es un cáncer común y agresivo que invade los huesos largos de razas grandes y gigantes de perros. Aun con la amputación del miembro afectado y quimioterapia, que es el tratamiento estándar, la tasa de supervivencia promedio es de sólo alrededor de un año.
- No dejes que tu mascota adquiera sobrepeso. Estudios muestran que el restringir la cantidad de calorías que un animal ingiere previene y/o retrasa el proceso de desarrollo de un tumor.
Menos calorías hacen que las células del cuerpo bloqueen el crecimiento de un tumor, mientras que demasiadas calorías pueden llevar a la obesidad, y la obesidad está estrechamente vinculada a un mayor riesgo de cáncer en los humanos. Existe una conexión entre el exceso de glucosa, aumento de la sensibilidad a la insulina, inflamación, y el estrés oxidativo – todos estos son factores de la obesidad - y cáncer.
Es importante recordar que la grasa no se queda simplemente en el cuerpo de tu mascota sin perjudicarla. Sino que produce inflamación que puede propiciar el desarrollo de tumores.
- Alimentalo con una dieta anti-inflamatoria. Cualquier cosa que crea o propicia la inflamación en el cuerpo aumenta el riesgo de cáncer. Investigaciones recientes indican que el cáncer es en realidad una enfermedad inflamatoria crónica. El proceso inflamatorio crea un entorno en el cual las células anormales proliferan.
Las células cancerígenas requieren de la glucosa en los carbohidratos para crecer y multiplicarse, así que debes limitar o eliminar la fuente de energía para el cáncer. Los carbohidratos a eliminar de la dieta de tu mascota son los granos procesados, fruta con fructuosa y verduras con almidón como las papas. Ten en cuenta que todos los alimentos secos para mascotas contienen alguna forma de almidón. Puede ser sin grano, pero no puede ser sin almidón, pues no es posible fabricar una croqueta sin el uso de algún tipo de almidón.
Las células cancerosas por lo general no pueden aprovechar la grasa como energía, por lo que cantidades adecuadas de grasa de buena calidad son nutritivas.
Otro de los principales contribuyentes de las condiciones inflamatorias es una dieta alta en ácidos grasos omega-6 y muy pocos omega-3. El Omega-6 aumenta la inflamación mientras que el omega 3 hace el efecto contrario. La comida procesada para mascotas normalmente se carga con ácidos grasos omega- y pocos omega-3.
Una dieta saludable para tu mascota - una que es antiinflamatoria y anticancerígena - consiste en alimentos realmente integrales, de preferencia crudos. Debe ser rica en proteína de alta calidad, incluyendo carne del músculo, órganos y hueso. Debe incluir cantidades moderadas de grasa animal y altos niveles de EPA y DHA (ácidos grasos omega-3, como el aceite de krill), unas pocas verduras frescas cortadas y un poco de fruta.
Esta dieta apropiada para la especie, es alta en contenido de humedad y no contiene granos ni almidones. También recomiendo agregar suplemento de vitaminas/minerales y algunos suplementos benéficos como probióticos, enzimas digestivas, y alimentos verdes.
- Reduce o elimina la exposición de tu mascota a las toxinas. Estas incluyen pesticidas químicos como son los preventivos para pulgas y garrapatas, productos químicos de césped (herbicidas, pesticidas, etc.), humo del tabaco, retardantes de flama, y productos de limpieza (detergentes, jabones, limpiadores, hojas para la secadora, y desodorantes).
Debido a que vivimos en un mundo tóxico y evitar todo tipo de exposición química es casi imposible, proporciona un protocolo de desintoxicación periódica para tus mascotas.
- Permite a tu mascota permanecer intacta (sin esterilizar/castrar), por lo menos hasta la edad de 18 meses a dos años. Estudios han vinculado la esterilización y castración al aumento de las tasas de cáncer en perros.
Un estudio en 2002 estableció un aumento en el riesgo de osteosarcoma en machos y hembras Rottweilers esterilizadas o castrados antes de la edad de un año. Otro estudio mostró que el riesgo de cáncer de huesos en perros grandes de raza pura esterilizados fue el doble que la de los perros intactos.
- Rechaza las vacunas innecesarias. Los protocolos de vacunación deberían adaptarse a minimizar los riesgos y maximizar la protección, teniendo en cuenta las especies, la raza, los antecedentes, el estado nutricional y la vitalidad general de tu mascota.