Hoy comienza la Semana Nacional de Prevención de Mordeduras de Perros del 2018, la cual está dedicada a concientizar y enseñarle a las personas cómo prevenir las mordeduras de perro. Casi 90 millones de perros viven con familias en todos los Estados Unidos.1 Y año con año millones de personas – sobre todo niños – sufren mordeduras de perro, la mayoría se pueden prevenir.
Tal y como informa la Asociación Americana de Medicina Veterinaria (AVMA, por sus siglas en inglés):2
- De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), entre 2003 y 2012 las mordeduras de perro fueron la undécima causa de lesiones no mortales entre niños de 1 a 4 años, la novena causa entre niños de 5 a 9 años y la décima causa entre niños de 10 a 14 años.
- El Insurance Information Institute calcula que, en 2013, las aseguradoras de todo el país pagaron poco menos de $500 millones de dólares en reclamaciones de indemnización por mordeduras de perros.
- Según la Sociedad Americana de Cirujanos Plásticos, en 2013 se realizaron casi 27 000 procedimientos reconstructivos para reparar lesiones causadas por mordeduras de perro.
- El Servicio Postal de los Estados Unidos informa que, en 2013, más de 5 500 empleados postales fueron atacados por perros. Niños, personas de edad avanzada y carteros fueron quienes sufrieron con más frecuencia este tipo de mordeduras.
- La organización American Humane Association informa que el 66 % de las mordeduras que sufren los niños ocurren en la cabeza y el cuello.
Cabe señalar que las estadísticas anteriores no se han actualizado desde 2013, sin embargo, la cantidad de perros que viven en los hogares de los Estados Unidos ha aumentado aproximadamente a 20 millones desde que las estadísticas se compilaron.
Por lo tanto, resulta lógico pensar que parte de la situación referente a las mordeduras de perros puede ser incluso peor de lo que indican estos números.
Otros 6 datos sobre las mordeduras de perro
De acuerdo con el AVMA:3
Cada año, más de 4.5 millones de personas en los Estados Unidos son mordidas por perros |
Casi 1 de cada 5 personas que sufrieron dicho tipo de mordeduras requieren atención médica |
Año con año más de 800 000 personas en los Estados Unidos reciben atención médica por mordeduras de perro; y por lo menos la mitad son niños. |
Los niños son, por mucho, quienes sufren con más frecuencia mordeduras de perro y son mucho más propensos a resultar gravemente heridos |
La mayoría de las mordeduras de perros que afectan a los niños pequeños ocurren durante las actividades diarias y mientras interactúan con los perros de la familia |
Las personas de la tercera edad son la segunda víctima más frecuente por mordedura de perro |
Reglas urbanas para evitar mordeduras de perro
Ten cuidado cuando te acerques a un perro extraño. No intentes acariciar a ningún perro antes de que te vea y te olfatee.
No le des la espalda a un perro desconocido ni intentes escapar, pues el instinto natural de muchos perros será perseguirte.
No intentes interactuar con un perro que está durmiendo, comiendo, jugando con un juguete o hueso, ni con una madre que esté con sus cachorros.
Los signos que un perro muestra cuando está a punto de morder son:
- Se congela abruptamente y mantiene su cuerpo rígido
- Se para con las patas delanteras separadas y baja la cabeza, mirándote fijamente
- Levanta los labios para mostrar sus dientes
Si sientes que un perro es una amenaza:
- No te muevas y pon tus manos a los costados
- Evita el contacto visual con el perro
- Si el perro ya no muestra interés, retrocede lentamente
- Si el perro se aproxima a ti de todos modos, dale cualquier cosa que tengas en la mano – por ejemplo, una cartera o chamarra – o algo que pueda distraerlo
- Si terminas en el suelo, ponte en posición fetal con las manos sobre los oídos y no te muevas–resiste el impulso de gritar o moverte
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10 recomendaciones para evitar que tu perro se convierta en un animal con tendencia a morder
Investiga el tipo de perro que mejor se adapte a tu familia y estilo de vida antes de elegir una mascota, y aborda inmediatamente el comportamiento negativo. Las adopciones o compras impulsivas suelen ser una mala idea.
Si este es tu primer perro, también debes considerar hablar con un veterinario, un empleado de refugio o centro de rescate que esté bien informado, un criador con buena reputación u otra persona que conozca el tema.
Si ves algún signo de comportamiento negativo, abórdalo de inmediato con la ayuda de un entrenador que trabaje con estímulos positivos o un especialista en conducta veterinaria. |
Asegúrate de que tu perro socialice y esté entrenado para responder consistentemente a los comandos básicos de obediencia como “siéntate”, “quieto”, “no”, y “ven”. La socialización adecuada y continua desde una edad temprana, es lo más importante que puedes hacer para reducir el riesgo de problemas conductuales en el futuro.
Los perros obtienen los mejores beneficios de la socialización vitalicia y las oportunidades constantes de interactuar con una variedad de nuevas personas, animales y entornos.
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Proporciónale a tu perro muchas oportunidades para hacer ejercicio. Tu perro necesita hacer ejercicio aeróbico regular y de alta intensidad tanto para abordar su condición física, como para obtener la estimulación mental que todo can necesita para estar bien equilibrado. |
El tiempo de juego es importante para tu perro, pero debes evitar los juegos que le resulten demasiado estimulantes o que hagan que te confronte, como los juegos de lucha o de forcejeo. Asimismo, nunca pongas a tu perro en una situación en la que se sienta intimidado o amenazado. |
Siempre utiliza una correa cuando salgas a la calle con tu mascota. Y recuerda que en los casos de perros de gran tamaño y con un comportamiento impredecible, no será suficiente ponerles una correa o arnés. Debes poder controlarlo independientemente de quién o qué encuentre.
Si no puedes con esto, debes buscar un curso de adiestramiento adicional, y mientras tanto, la persona en tu hogar que pueda controlar eficazmente a tu mascota al salir, debe ser el encargado de pasear al perro en cuestión. |
Si permites que tu perro salga exclusivamente en un patio cercado, asegúrate de que las puertas estén bien cerradas y que no haya otras rutas de escape. Si tu mascota es ávida por saltar, tu cerca debe alcanzar una mayor altura de lo que puede brincar. Si le gusta cavar o masticar, deberás implementar las medidas necesarias para asegurarte de que no pueda hacer un túnel para salir de tu jardín. |
Implementa medidas proactivas para cuidar la salud de tu mascota. Proporciónale una alimentación que sea nutricionalmente equilibrada y apropiada para su especie, asegúrate de que haga suficiente ejercicio, cepíllale sus dientes, báñala y cepilla su pelo regularmente, también llévala anualmente a consultas de bienestar con su veterinario. |
Procede con precaución cuando debas vacunar a tu mascota. Un mayor número de evidencia señala que, en particular, la vacuna contra la rabia está contribuyendo a la agresión en algunos perros. Como las vacunas antirrábicas son obligatorias por ley, opta por la vacuna de 3 años y evita la vacuna de 1 año.
Te recomiendo que después de cada vacuna contra la rabia consultes con tu veterinario holístico la vacuna Lyssin, que es desintoxicante, homeopática y antirrábica. |
Además, consulta con tu veterinario sobre el mejor momento para esterilizar o castrar a tu perro. Además de las cuestiones reproductivas, las mascotas que no han sido castradas suelen ser más agresivas en comparación con las castradas.
No recomiendo dejar sin castrar a los cachorros agresivos, pero tampoco soy partidaria de aplicar el mismo enfoque para castrar a todos los cachorros. El tiempo de este procedimiento es crítico, y debe decidirse en función del estado de salud y la personalidad de cada perro. |
Enséñales a los niños–los tuyos y los de los demás que se acercan a tu perro–cómo comportarse con un animal. Los niños sin duda alguna son quienes sufren con más frecuencia mordeduras de perro. Deben aprender a ser prudentes y respetuosos en presencia de cualquier can, incluyendo el tuyo. Y nunca, bajo ninguna circunstancia, dejes a un bebé o un niño pequeño solo con un perro. |
Más temas de reflexión para quienes tengan perros
Así como el comportamiento de un niño es diferente al de un adulto, el comportamiento de tu cachorro cambiará conforme vaya creciendo. A medida que se desarrolle física y socialmente, su conducta también se transformará de maneras tanto sutiles como abruptas. Aun y cuando hayas hecho un gran trabajo para que socialice y esté entrenado, no des por sentado que está "completamente educado.”
El aprendizaje permanente, la socialización y la estimulación mental son fundamentales para que tu mascota se convierta y permanezca siendo en un ser vivo equilibrado. El entrenamiento continuo y la modificación proactiva de la conducta cuando se esté desarrollando un problema, evitarán cualquier problema de agresividad.
Por lo general, los perros necesitan un curso de actualización enfocado a la obediencia o socialización entre los 2 y 3 años de edad. Si no estás satisfecho con uno o más de los comportamientos de tu perro, continúa con el adiestramiento hasta que pueda comportarse como esperas.
Si adoptas un perro, sobre todo un cachorro, durante los meses más fríos del año, necesitará seguir socializado antes de que el clima cálido se apodere del entorno, sonidos y otros estímulos de la vida. Esperar hasta que mejore el clima o tengas más tiempo en tu agenda pone a tu cachorro en riesgo de perder el tiempo ideal para su desarrollo que, años después, se convierte en comportamientos indeseables, respuestas de miedo y reacciones inapropiadas.
Las mordeduras de perro son más comunes en climas cálidos. Probablemente esto se deba a que una mayor cantidad de niños juegan al aire libre con sus mascotas, junto con perros que se vuelven irritables y agresivos en el calor.