La temporada de verano ha llegado, al igual que los parásitos y otro tipo de plagas que molestan a nuestras mascotas. Hoy te quiero hablar específicamente sobre la enfermedad transmitida por las garrapatas en gatos. Ya te explique demasiado sobre la enfermedad transmitida por garrapatas en los perros, pero la misma enfermedad en los gatos es un tema completamente diferente.
Las garrapatas se adhieren a su víctima porque necesitan ingerir sangre animal para sobrevivir y desarrollar larvas durante la edad adulta. Las larvas necesitan sangre para convertirse en ninfas; las ninfas necesitan sangre para convertirse en adultas; y las garrapatas hembra adultas necesitan sangre con el de fin de aparearse y poner sus huevecillos.
Es una garrapata, ya sea ninfa o adulta en la etapa de desarrollo que, si se le da la oportunidad, se pegara al cuerpo de tu gato y comenzar a alimentarse de sangre. Si resultara que la garrapata es portadora de un agente infeccioso, será transmitido al gatito, entrara al sistema circulatorio y comenzara rápidamente a reproducirse.
La buena noticia es que la mayoría de las garrapatas no portan una enfermedad y la mayoría de los gatos viven toda su vida sin adquirir una enfermedad transmitida por garrapatas. Afortunadamente los gatitos parecen conocer muy bien incluso las plagas más pequeñas en sus cuerpos, probablemente debido a su hipersensibilidad a los cambios en el medio ambiente. A menudo un gato detectara y quitara una garrapata antes de que tenga la oportunidad de atacar.
Sin embargo, dicho eso, decidí escribir este artículo debido que recibo muchas preguntas sobre las garrapatas y las pulgas, y en ocasiones, los veterinarios se enfrentan con enfermedad transmitida por garrapatas en pacientes felinos.
Cytauxzoonosis
Hay muchas enfermedades transmitidas por las garrapatas que pueden enfermar a tu gatito—incluso al punto de la muerte. Una de las peores es la Cytauxzoonosis felina, también conocida como fiebre de gato montés.
La Cytauxzoonosis es causada por un parasito sanguíneo llamado Cytauxzoon felis que infecta tanto el tejido como la sangre del gato. En un proceso destructivo que toma tres semanas desde el tiempo de la infección, el gatito finalmente sangrara y se morirá.
En los Estados Unidos, el huésped natural del Cytauxzoon felis es el gato montés y el parasito no causa la enfermedad en los gatos montes. Las garrapatas Lone Star se alimentan de la sangre del gato montés, después lo abandonan, se van a la siguiente etapa de vida y se pegan en el siguiente anfitrión, si el siguiente anfitrión suele ser un gato doméstico, la infección Cytauxzoonosis podría presentarse.
La única manera que un gato puede adquirir la Cytauxzoonosis es por medio de una mordida de garrapata infectada que se alimentó de un gato montés, afortunadamente, la enfermedad es muy rara. Se han reportado casos de Cytauxzoonosis en Arkansas, Florida, Georgia, Illinois, Kansas, Kentucky, Louisiana, Mississippi, Missouri, North Carolina, Oklahoma, South Carolina, Tennessee, Texas y Virginia. Los gatos que deambulan en el exterior en los estados del sudeste y del medio oeste están en mayor riesgo.
Los síntomas de Cytauxzoonosis incluyen depresión, anemia severa, fiebre alta, pérdida de apetito, deshidratación, encías pálidas, letargo, dificultad para respirar, e ictericia, que es un color amarillento en la piel.
Tristemente, la enfermedad a menudo es fatal, pero si el protocolo de tratamiento se implementa rápidamente, algunos gatos si se recuperan.
Un tratamiento relativamente nuevo combina medicamentos anti-malaria con antibióticos y ha mostrado ser prometedor. Estos medicamentos son administrados oralmente por 10 días junto con cuidado de apoyo. Cerca del 60 por ciento de los gatitos infectados que pasan por este protocolo sobreviven.
Desafortunadamente, los gatos que se recuperan de Cytauxzoonosis podrían seguir portando el parasito y podrían sufrir una recurrencia a la infección.
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Tularemia
Otra enfermedad potencialmente mortal en los gatos transmitida por las garrapatas es la tularemia, también conocida como la fiebre de conejo. La tularemia es causada por la bacteria Francisella tularensis, que la portan cuatro especies de garrapatas de Norte América: la garrapata de madera de las montañas rocosas, la garrapata de perro, la garrapata de la Costa del Pacifico y la Garrapata Lone Star.
Las garrapatas se infectan al alimentarse de un animal o ave infectada y pueden transmitir la bacteria a otro animal en cualquier momento durante el ciclo de dos años de la garrapata. Los gatos también se infectan de tularemia cuando se alimentan de roedores y conejos infectados.
Los signos de infección por tularemia en gatos pueden presentarse sin síntomas, enfermedad ligera, con ganglios linfáticos hinchados y fiebre, hasta una severa infección abrumadora y muerte. Los síntomas pueden incluir bultos en el sitio donde mordió la garrapata, ulceras en la boca, ulceras gastrointestinales, fiebre, pérdida de apetito, letargo, ganglios linfáticos agrandados, escurrimiento en los ojos y nariz, salpullido, y bultos internos que involucran el vaso o el hígado.
La tularemia se puede detectar con una prueba sanguínea, siempre y cuando la infección haya estado presente por mucho tiempo para que el cuerpo del gato haga anticuerpos. El diagnostico final puede hacerse al fermentar la bacteria F. tularensis en un laboratorio con el uso de una descarga o un tejido del animal infectado.
Desafortunadamente, a menudo la tularemia no es se diagnostica hasta que el gato muere como consecuencia, por lo que el mejor antibiótico para tratar la infección aún no ha sido identificado.
Es importante tener en cuenta que la tularemia es una enfermedad zoonótica que se puede transmitir en los humanos a través de una mordida de un gato infectado. Los casos de la tularemia han sido reportados en todo Estados Unidos, pero la mayoría se han reportado en los estados del medio oeste, particularmente Oklahoma.
Haemobartonellosis
Otra enfermedad potencialmente mortal en los gatos transmitida por garrapatas es la hemobartonelosis, también conocida como la anemia infecciosa felina o micoplasmosis hemotropic felina. Esta enfermedad es más común que la cytauxzoonosis o tularemia, y ataca los glóbulos rojos que transportan el oxígeno por todo el cuerpo del gato.
La hemobartonelosis en los gatos es causada generalmente por Micoplasma haemofelis, antes conocida como Haemobartonella felis, que pertenece a un grupo de microorganismos llamados micoplasma que viven dentro de los glóbulos rojos.
Las garrapatas y las pulgas también se infectan con microplasma al alimentarse de un animal infectado, y luego infectar a un gato cuando se le pegan. La micoplasma también se puede transmitir de un animal infectado a un animal no infectado por una transfusión de sangre. Las gatas madre pueden infectar a sus hijos a través de la transmisión transparentaría. La enfermedad también se puede transmitir a través de mordeduras de gato.
La hemobartonelosis en los gatos puede variar desde muy leve y asintomática, hasta una ligera anemia o enfermedad severa. Los síntomas pueden incluir depresión, pérdida de apetito y deshidratación. Si la anemia es profunda, puede causar membranas mucosas pálidas (encías blancas), debilidad, pérdida de peso, ritmo cardíaco y respiración acelerada, ictericia y muerte, que por desgracia es un común síntoma repentino.
Los gatitos con leucemia felina (FeLV) son más propensos a tener una forma grave de la infección Haemobartonella. Si las pruebas de tu gatito detectan la hemobartonelosis, también te recomendaría analizarlo para detectar la leucemia felina.
Normalmente se administran antibióticos durante tres semanas a los gatos que se ocupan de esta infección. En gatitos con una forma rápidamente progresiva de la enfermedad, se requerirá la hospitalización, así como una transfusión de sangre.
Si no se trata, algunos gatitos morirán a causa de una infección Haemobartonella. Otros se recuperan, pero pueden convertirse en portadores del organismo, haciendo que la enfermedad se repita cuando sus cuerpos se estresan.
Es importante señalar que la hemobartonelosis es una enfermedad completamente diferente a la bartonelosis felina, que es confuso porque suenan muy similares.
Babesiosis
La babesiosis es otra rara enfermedad en los gatos transmitida por garrapatas, causada por el parásito Babesia felis. Se cree que las infecciones en los gatitos ocurren principalmente por las picaduras de garrapatas, pero otras vías de transmisión incluyen la transferencia de sangre de un perro o mordedura de gato, transfusiones de sangre y a través de la placenta de las gatas cargadas.
La infección por lo general se presenta dos semanas después de la exposición, pero en muchos casos los síntomas siguen siendo leves y la enfermedad no se diagnostica en meses o incluso años. La babesiosis puede causar anemia hemolítica tanto directa como inmune mediada.
Los síntomas de la infección pueden incluir falta de energía, pérdida de apetito, pérdida de peso, membranas mucosas pálidas, ictericia y anemia. El tratamiento tradicional para la babesiosis en los gatos es administrarle un medicamento contra la malaria y en ocasiones en combinación con un antibiótico y cuidado de apoyo. Las transfusiones de sangre pueden ser necesarias si la anemia es grave.
Ehrlichiosis
La ehrlichiosis es otra enfermedad poco común en los gatos transmitida por garrapatas que se cree que es causada principalmente por los organismos rickettsias Ehrlichia canis y Ehrlichia risticii.
Los organismos Rickettsia entran en las células del cuerpo y actúan como parásitos, matando eventualmente a las células. La ehrlichiosis ha sido reportada en gatos en Estados Unidos, así como en Europa, América del Sur, África y el Lejano Oriente.
Los síntomas de la enfermedad pueden incluir letargo, depresión, pérdida de apetito, pérdida de peso, vómitos y diarrea, fiebre, mucosas pálidas, anemia, dificultad para respirar, ganglios linfáticos, articulaciones hinchadas e inflamadas, y ojos llorosos.
Dependiendo de la severidad de los signos clínicos, las opciones de tratamiento pueden incluir atención ambulatoria o en algunos casos, hospitalización. La terapia con antibióticos es la base del tratamiento para la ehrlichiosis felina. En pacientes gravemente enfermos, la terapia con líquidos vía intravenosa (IV), transfusiones de sangre y otras formas de atención de apoyo podrían ser indicadas.
Prevención de la Enfermedad en Gatos Transmitida por Garrapatas
Puesto que todas las enfermedades transmitidas por las garrapatas tienen el potencial de provocar la muerte, te recomiendo lo más que puedas, no exponer a tu gato a las garrapatas. Esto lo puedes lograr manteniendo tu gatito dentro de casa, y en caso de que salga a la calle debe ser bajo estricta supervisión.
Si permites que tu gatito salga, debería ser un paseo contigo con un arnés y una correa, o en un recinto seguro en donde pueda estar sin que otros animales tengan acceso. Durante los meses de verano, es importante cepillar regularmente el pelaje de tu gato--por lo menos diariamente en caso de que salga todos los días-- y espulgarlo para eliminar cualquier cosa que se le haya pegado a su cuerpo.
Yo permito que mis gatos salgan todos los días bajo mi supervisión. Después de que los gatitos se meten por la noche, les reviso el cuello en busca de garrapatas. En caso de que descubrieras una garrapata en tu gato, es necesario quitarla con pinzas o una herramienta especialmente diseñada para eliminar garrapatas. Es importante que elimines la garrapata completa, incluyendo la cabeza, aplicando presión a medida que la jala. Asegúrate de desinfectar el área después de eliminar la garrapata.
La forma más segura de deshacerte de las garrapatas es echándolas en una botella de alcohol y sellarla herméticamente antes de tirarla. También te recomiendo utilizar guantes para evitar tocar directamente la garrapata y lávate las manos inmediatamente.
No estoy a favor de aplicar preventivos químicos contra pulgas y garrapatas o collares que contengan productos químicos potencialmente tóxicos para cualquier mascota, en especial en los gatos debido a su extrema sensibilidad a muchas de estas sustancias químicas. Y bajo ninguna circunstancia le apliques a tu gato un producto contra pulgas y garrapatas diseñado para perros, ya que podría ser fatal.
Si a tu gato le gusta salir a dar paseos regularmente, te recomiendo utilizar un repelente seguro contra garrapatas como los productos de aceite de geranio que son diseñados para alejar a las garrapatas de los gatos. También puede considerar echarle a tu gatito tierra de diatomeas, cuidando de no echársela en la cara y la cabeza. También puedes usar collares totalmente naturales contra garrapatas hechos específicamente para gatos.