10 Razones para revisar los ojos de tu perro

ojos de perro

Historia en Breve

  • Dado que existe una serie de enfermedades oculares que ocurren en los perros, es necesario controlar la salud ocular de las mascotas, así como los posibles cambios en su visión
  • Dos afecciones comunes que pueden afectar los párpados son el entropión, en el cual el párpado inferior se voltea hacia adentro, y el ectropión, donde el párpado inferior se dobla hacia afuera
  • Las cataratas causan una apariencia azulada en los ojos, así como la esclerosis nuclear, que es un cambio inofensivo que ocurre en los ojos debido al envejecimiento
  • Cualquier cambio en los ojos o la visión de tu perro requiere de atención veterinaria inmediata para un mayor diagnóstico y tratamiento, de ser necesario

A diferencia de muchas personas, los perros no reciben exámenes oculares de manera anual. Los oftalmólogos veterinarios certificados generalmente atienden perros con enfermedades oculares sospechosas o diagnosticadas, mientras que el "optometrista veterinario" en realidad no existe (¡porque los animales no usan anteojos ni lentes de contacto!).

Como resultado, la mayoría de las personas no consideran la salud ocular de su mascota hasta que algo ocurre, y aunque no lo creas, existen muchas otras cosas que pueden empeorar la salud ocular de los perros, así como su capacidad para ver. De hecho, en una lista de afecciones comunes en los perros, 9 de las 26 principales involucraron enfermedades oculares.

Afecciones oculares comunes en perros

1. Entropión — El entropión es una afección en la que se voltea una porción del párpado de un perro, lo que significa que se encuentra plegado o enrollado hacia adentro. Esto puede causar que las pestañas u otro cabello se froten contra la superficie del ojo, lo cual provoca irritación y dolor. Si el roce provoca daños en la superficie ocular, puede causar ulceración o perforación corneal. También puede desarrollar tejido cicatricial sobre la lesión como una condición conocida como queratitis pigmentaria.

Un perro con esta afección entrecerrará los ojos y desarrollará una cantidad excesiva de secreción en el ojo afectado. En ocasiones puede tener sensibilidad a la luz y que se frote con las patas, especialmente cuando se encuentra en exteriores. Otros síntomas incluyen inflamación del ojo interno, tic ocular o piel flácida alrededor de la cuenca ocular.

Algunos casos de entropión no son más que una molestia menor, mientras que los casos más graves pueden causar dolor, ulceración ocular, cicatrización y pérdida de visión.

2. Ectropión — Esta afección se asemeja al entropión, ya que el párpado inferior se sale de la superficie ocular El síntoma más común de ectropión es un párpado inferior caído. Los perros afectados también tienden a desarrollar ojos llorosos, conjuntiva inflamada o enrojecida, coloración del lagrimal, inflamación o infecciones oculares.

Los síntomas del ectropión a menudo parecen mejorar, pero se repiten en un futuro. En casos severos, los síntomas no mejoran sin tratamiento.

3. Queratoconjuntivitis seca (KCS, por sus siglas en inglés) o resequedad ocular — La resequedad ocular es una afección en la que la mezcla que conforma las lágrimas, la cual consiste en aceite, mucosa y agua, se encuentra ausente. Únicamente se secreta aceite y mucosa, por lo que los perros con KCS desarrollan una secreción espesa y amarillenta en los ojos. Se desarrolla enrojecimiento en los ojos, mientras que la córnea, con el tiempo, se torna marrón. Si no se trata, puede producir ceguera.

4. Cataratas — Las cataratas forman una nube azul de diversos grados dentro de la cápsula que alberga el cristalino del ojo. Las cataratas pueden progresar muy lento durante muchos años o pueden aparecer drásticamente, lo que causa ceguera en unos pocos días o semanas.

Las cataratas caninas a menudo se heredan. También se pueden causar por diabetes, toxicidad de los medicamentos y preventivos de plagas, otras enfermedades oculares subyacentes, daños en el ojo, deficiencias nutricionales en cachorros y envejecimiento. En un perro mayor, es importante distinguir las cataratas de otra afección ocular que causa una apariencia turbia y gris azulada conocida como esclerosis nuclear, la cual se considera como parte normal del envejecimiento.

Si a tu perro le diagnosticaron cataratas, aquellas que causan menos daño, deben revisarlas de manera periódica para monitorear su progreso. En ocasiones se recetan gotas antiinflamatorias para los ojos. Pero si tiene problemas con la visión sucede lo mismo con su calidad de vida; y si las cataratas progresan rápido, se recomienda realizar una cirugía para restaurar su visión.

5. Atrofia progresiva de la retina (ARP) — La ARP es una enfermedad hereditaria que provoca la pérdida de la vista durante un período de meses o años. La ARP se presenta con mayor frecuencia en los cocker spaniels, border collies, irish setters, norwegian elkhounds, schnauzers y poodles.

La retina, que se encuentra en la parte posterior del ojo, está compuesta de varillas que perciben la luz y conos que perciben el color. Por lo general, las varillas y los conos maduran cuando un animal alcanza las 12 semanas de edad, pero en algunas mascotas con ARP, estos no maduran por completo y pueden comenzar a degenerarse a una edad temprana.

6. Ojos de cereza — El término médico para esta afección es "prolapso de la tercera glándula del párpado". Los perros tienen una membrana en la esquina del ojo, ubicada debajo del párpado inferior, la cual alberga una glándula lagrimal. Cuando esta glándula se encuentra saludable, no es perceptible. Pero en ocasiones, podrás percibir un tejido rojizo, engrosado y con un aspecto irritado en la esquina del ojo.

Una vez que esta glándula se dilata, puede inflamarse periódicamente e incluso desarrollar una infección. Por fortuna, el ojo de cereza no suele ser doloroso para los perros. Sin embargo, debido a que la glándula ya no se encuentra en su posición habitual, puede evitar la lubricación adecuada del ojo.

7. Triquiasis — La triquiasis es común en las razas braquicefálicas con narices chatas y ojos prominentes, como el pequinés, el pug y el bulldog, así como en razas de pelo largo alrededor de los ojos, como el cocker spaniel.

La triquiasis puede causar estrabismo o parpadeos, lagrimeos excesivos, espasmos en los párpados, hinchazón, irrupción de los vasos sanguíneos de la córnea y pigmentación del iris (la parte coloreada del ojo).

8. Úlcera corneal — Las úlceras corneales son heridas en la córnea causadas por una abrasión, rasguño, punción u otro daño en el ojo. Las causas menos comunes incluyen cuerpos extraños en el ojo, quemaduras químicas, infecciones, falta de lágrimas, incapacidad para cerrar los ojos por completo, entropión, enfermedades y parálisis del nervio facial.

Una úlcera corneal puede involucrar desde una o hasta cuatro capas. Una úlcera leve o superficial involucra solo el epitelio. Las úlceras se consideran como graves o profundas cuando también afectan las capas medias e internas de la córnea.

Estas úlceras, a veces conocidas como queratitis ulcerosa, son una lesión ocular bastante común en los perros. Pueden causar mucha irritación e incomodidad en las mascotas.

9. Luxación del cristalino — En algunos perros, los ligamentos de soporte del cristalino se debilitan o rasgan, lo que hace que el cristalino se desplace de su posición normal. Se sabe que la debilidad de los ligamentos del cristalino es hereditaria en terriers, Shar Pei chino y border collie.

El desplazamiento del cristalino puede suceder hacia atrás del ojo (luxación posterior), una situación generalmente indolora. Por otra parte, el cristalino puede trasladarse en dirección al ojo (luxación anterior), donde bloquea el drenaje de líquido y puede provocar glaucoma o aumento de la presión intraocular (PIO), lo cual es muy doloroso y puede causar ceguera permanente.

10. Glaucoma — En perros, el glaucoma puede ser primario o secundario. El glaucoma primario es hereditario y ocurre en numerosas razas, incluyendo el cocker spaniel, basset hound, chow, jack russell, shih tzu y el husky siberiano. El glaucoma primario generalmente comienza en un ojo e involucra ambos ojos con el tiempo.

El glaucoma secundario ocurre cuando existen otras enfermedades oculares que inhiben el drenaje del humor acuoso dentro del ojo. Estas enfermedades incluyen inflamación ocular (uveítis), cataratas avanzadas, cáncer ocular, desplazamiento del cristalino y desprendimiento crónico de retina.

La creciente presión dentro del ojo por el glaucoma es dolorosa La presión aumenta mucho más en perros que en humanos, por lo que podemos suponer que esta condición es más dolorosa para ellos que para nosotros. El dolor del glaucoma se percibe como un dolor de cabeza muy fuerte.

La pérdida de visión es otro síntoma y, a menudo, es lo que lleva a los dueños al veterinario. Por desgracia, la ceguera permanente puede ocurrir en cuestión de horas, en aquellos casos de glaucoma en pleno desarrollo donde la presión dentro del ojo se vuelve muy alta, de manera muy rápida.

No hace falta decir que cualquier cambio notable en los ojos de tu perro o en su capacidad para ver debería ser la causa de una consulta con el veterinario. Los ojos de tu mascota deben examinarse de inmediato para determinar un diagnóstico, así como un tratamiento.

Publicidad
Clic aquí para aprende másClic aquí para aprende más

Haga clic aquí y sea el primero en comentar sobre este artículo
Publique su comentario