Si tu mascota está enferma o lesionada, podría ser difícil determinar si puede ser atendida en casa de forma segura o si es necesario acudir con el veterinario o al hospital de urgencias animales más cercano. Por un lado, no debes someter a tu peludo familiar al estrés adicional de una visita veterinaria innecesaria; por otro lado, debes asegurarte de que reciba atención médica, en caso de ser necesario.
Otra cuestión que debes considerar es que, dado que los perros y, en especial, los gatos están programados para ocultar los síntomas de enfermedades y lesiones, si tu mascota demuestra signos de incomodidad o un poco de dolor, es muy probable que la situación sea peor de lo que parece.
Siempre es mejor actuar con excesiva precaución. Si tienes dudas, puedes llevar a tu mascota a revisión. Las visitas regulares de salud también podrían ayudarte tanto a ti como a tu veterinario a saber lo que es normal o no en tu mascota, y si los padecimientos existentes han mejorado o se han agravado.
Padecimientos que requieren una atención urgente
Por ejemplo, en el caso de algunos problemas médicos, como diarrea o irritación cutánea leve, es adecuado hacer una cita veterinaria sin urgencia. En otros casos, no es una opción, ya que podría poner en riesgo la vida de tu mascota.
Enseguida se enlistan algunas enfermedades, síntomas y situaciones que justifican una atención veterinaria de emergencia. Si observas alguna de las siguientes señales, debes llevar a tu mascota a una clínica veterinaria de urgencias.
Sangrado severo o hemorragia que no se detiene en cinco minutos |
Asfixia, problemas para respirar o tos continua y náuseas |
Hemorragia nasal, en la boca, recto, tos con sangre u orina sanguinolenta |
Incapacidad para orinar o defecar (heces), o dolor evidente relacionado con la función de orinar o defecar |
Lesión en el ojo(s) |
Consumo de sustancias tóxicas (como anticongelante, xilitol, chocolate, veneno para roedores, etc.) |
Crisis epilépticas o desestabilidad al caminar |
Fracturas óseas, cojera severa o incapacidad para mover las piernas |
Signos evidentes de dolor o ansiedad extrema |
Estrés por calor o golpe de calor |
Vómito o diarrea severos. Más de dos episodios en un período de 24 horas, o cualquiera de los anteriores combinados con una enfermedad evidente u otros de los problemas que se enlistan enseguida. |
Rechazo a beber líquidos durante 24 horas o más |
Perdida de la consciencia |
Heridas penetrantes en el pecho, incluyendo perforaciones o laceraciones profundas |
Fiebre mayor a 104°F con mucho letargo |
Ojos hinchados y ceguera repentina |
Quemaduras o lesiones con hueso expuesto |
Pérdida del equilibrio (incapacidad para enderezarse o caerse debido a la falta de equilibrio) |
Síntomas de inflamación (vólvulo de dilatación gástrica), incluyendo un abdomen muy distendido, eructos improductivos, náuseas o vómitos, dolor abdominal, agitación, respiración rápida y superficial, y encías de color pálido |
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Situaciones urgentes (que usualmente no representan una urgencia)
• Problemas oculares. Si observas algún cambio en los ojos o vista de tu mascota, debes comunicarte con tu veterinario y programar una cita para el día siguiente. Algunos padecimientos oculares incluyen lesiones, como rasguños, problemas en los párpados o pestañas, y enfermedades crónicas como el glaucoma, entre otras.
• Vómito y diarrea. El vómito y diarrea leve pueden atenderse en casa, siempre que se solucionen con rapidez y tu mascota no esté letárgica ni manifieste otros síntomas de enfermedad. Si el vómito y la diarrea continúan por más de 24 horas, debes buscar un servicio de atención veterinaria.
En el caso de la diarrea leve, puedes ofrecerle una cucharadita de calabaza al 100 % (enlatada o cocida) por cada 10 libras de peso corporal, una o dos veces al día, ya sea junto con su alimento regular, con una dieta blanda o como premio (esto también sirve para aliviar el estreñimiento y las bolas de pelo en los gatos).
• Reacciones alérgicas. Por lo general, las reacciones alérgicas menores por mordeduras o picaduras de insectos y las alergias a los alimentos pueden solucionarse en casa. Tu mascota podría experimentar una ligera inflamación, urticaria o picazón, pero si exhibe problemas para respirar o parece incómodo, debes buscar un servicio de atención veterinaria de inmediato.
Para atender una reacción alérgica leve a una picadura de abeja, puede utilizar Apis mel homeopático, quercetina o Benadryl si la inflamación no puede controlarse con métodos naturales. Las reacciones alérgicas graves requieren de una visita inmediata al veterinario o a la clínica de urgencias veterinarias más cercana.
Si los síntomas alérgicos de tu mascota son crónicos, te recomiendo consultarlo con un veterinario integrativo que pueda ayudarte a descifrar las causas de la alergia, así como a desarrollar un plan de tratamiento natural para aliviar a tu mascota.
Recomendaciones rápidas para tratar lesiones y enfermedades menores en mascotas
- Lesiones en las uñas. Los perros y gatos pueden dañar sus uñas de diferentes maneras, desde un corte de uñas muy corto, hasta correr al aire libre en rocas afiladas. Solución: polvo estíptico. Si no tienes polvo estíptico disponible, es recomendable utilizar maicena o harina para tratar un sangrado leve; puedes verter un poco en un tazón pequeño y sumergir la pata lesionada en el polvo para detener la hemorragia.
- Cortadas y rasguños. Muchas mascotas se hacen pequeñas cortadas y rasguños mientras pasean o corren por el patio del jardín trasero. Solución: solución salina para lentes de contacto. Puedes limpiar la suciedad y residuos de una herida leve con una solución salina para lentes de contacto. También, puedes utilizarla para eliminar la suciedad, arena u otros irritantes del ojo de tu mascota.
- Estreñimiento, diarrea, bolas de pelo y otros problemas digestivos leves. En algún momento u otro, la mayoría de las mascotas experimenta problemas gastrointestinales durante algunos días, que luego desaparecen. Solución: calabaza enlatada. Es una buena idea tener disponible una lata de calabaza al 100 % en el gabinete de la cocina para tratar molestias estomacales leves y ocasionales. Puedes proporcionarle una cucharadita de calabaza por cada 10 libras de peso corporal, una o dos veces al día, ya sea en los alimentos o como premio. La calabaza es rica en fibra soluble, la cual puede ayudar a aliviar la diarrea y estreñimiento.
- Patas inflamadas, con picazón o irritación. Este es un problema muy común, en especial en los perros, y más cuando la temperatura es elevada. Solución: remojar sus patas. Sumerge las patas de tu mascota en una solución de agua mezclada con povidona yodada (marca Betadine); agrega suficiente yodo hasta que el agua tome el color del té helado. Esto desinfectará y aliviará de forma segura las patas de tu mascota mientras elimina su irritación. Toma en consideración que esta solución puede manchar un pelaje blanco con un tono más oscuro.
En la mayoría de los casos, aun cuando es una lesión o enfermedad menor, después de aplicar un remedio casero, podría ser una buena idea hacer el seguimiento con tu veterinario para asegurarte de que tu perro o gato reciba la atención adecuada. Es probable que no necesite una cita, pero tu veterinario puede registrar la información en el historial de tu mascota para hacer seguimiento en su próxima visita programada de rutina.