Qué hacer cuando tu gato se pone agresivo y saca el tigre que lleva dentro

Como la mayoría de las cosas relacionadas con felinos, la agresión en los gatos puede ser un verdadero misterio. Algunos de los factores desencadenantes que hacen que tu gato saque el tigre que lleva dentro suelen ser inesperados, por ejemplo, algo afuera de la ventana puede hacer que ataque de forma repentina al familiar de dos o cuatro patas más cercano.

Por lo general, la agresión felina se presenta de cinco formas: agresión territorial, agresión relacionada con el miedo, agresión relacionada con las caricias, agresión relacionada con el juego o agresión redirigida.

Agresión territorial

A diferencia de los perros, por naturaleza, los gatos no son tan sociales. Si eligen mezclarse con otros gatos, suele ser un pariente cercano (por ejemplo, un compañero de camada) o un gatito con el que han crecido. Esta es la razón por la que, a menudo los gatitos en hogares con múltiples gatos que fueron introducidos como adultos, no se llevan tan bien con los demás gatos.

En la naturaleza, los felinos pueden evitar fácilmente a los gatos que no les agradan. Pero dentro de tu casa, tus gatitos tienen opciones limitadas para alejarse unos de otros. Esto puede preparar el escenario perfecto para la fricción felina, un problema que suele tomar la forma de un gato que acecha, persigue o muestra agresión hacia otro.

Los gatos son bastante territoriales y si uno de tus gatitos interfiere con lo que el otro considera su territorio, como su lugar favorito para tomar una siesta, juguete o humano, entonces empieza la pelea. A menudo, el problema se agrava porque los gatos viven muy cerca unos de otros y comparten tazones de comida, cajas de arena, cama, juguetes, etc.

"Es como si los gatos se movieran dentro de una burbuja", dice el conductista veterinario Dr. John Ciribassi. "Eso determina el espacio entre los gatos. Llevan su territorio con ellos".

Por desgracia, incluso los gatos que han sido amigables durante años, incluidos los hermanos, pueden empezar a tener problemas entre ellos. Algunos detalles que para los humanos no parecen tener mucha importancia pueden dañar el vínculo entre los gatos para siempre. Por ejemplo, un gatito que fue hospitalizado puede regresar a casa con un olor a clínica veterinaria. En respuesta, su compañero felino ya no ve a su viejo amigo como parte de su grupo social.

Agresión relacionada con el miedo

La agresión basada en el miedo puede ser provocada por estímulos desconocidos o desagradables, como una nueva persona, animal o ruido, un viaje en automóvil o una visita al veterinario. Los gatos que muestran agresión por miedo tienden a aplanar sus orejas contra sus cabezas, maúllan, muestran sus dientes, se tiran al suelo con la cola doblada y literalmente, se les ponen los pelos de punta.

La mejor manera de lidiar con la agresión relacionada con el miedo es identificar y evitar situaciones que produzcan una respuesta temerosa en tu gato. Para situaciones que no pueden evitarse, puedes tratar de desensibilizar a tu gato de forma gradual al exponerlo brevemente y a una distancia considerable al estímulo que le causa el miedo, para después recompensar el comportamiento sin agresión con comida y elogios.

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Agresión relacionada con las caricias

Si tu gato se pone agresivo de forma inesperada mientras lo acaricias, es una situación que puede ser realmente confusa, en especial si primero buscó tu atención y de repente se puso en tu contra. Por suerte, existe una explicación para este comportamiento que te hará sentir un poco mejor.

Algunos gatos, por razones que solo ellos conocen, tienen un "límite de caricias" innato, lo que significa que tienen una baja tolerancia a ser acariciados y tocados por manos humanas. Cuando tu gato alcanza su límite de caricias, probablemente use su lenguaje corporal para avisarte. Por ejemplo, puede ponerse tenso. Puede bajar las orejas, mover la cola o tratar de soltarse. Incluso puede gruñir.

El truco es aprender a reconocer su lenguaje corporal y dejarlo ir a la primera señal. Además, tampoco es una buena idea sujetar a tu gato mientras lo acaricias. En general, siempre es mejor dejar que se acerque. A los gatos les gusta sentirse en control de su entorno. Quieren interactuar bajo sus términos. Tocar sin invitación no es una buena manera de relacionarse con un gato.

Cuanto más deje que tome sus propias decisiones, mayor será la probabilidad de que trate de interactuar más contigo. E incluso cuando está en tu regazo, es posible que no quiera que lo acaricies mucho, por lo que es importante leer su lenguaje corporal. Algunos gatos son más tiernos que otros.

Agresión relacionada con el juego

La agresión relacionada con el juego es bastante común en los gatos adultos y jóvenes. Por ejemplo, esconderse debajo de la cama o golpear tus pies o tobillos mientras caminas puede ser un pasatiempo muy divertido para un gatito joven y saludable. Otro juego divertido es "acechar" y saltar sobre tus dedos debajo de las sábanas.

Los gatos criados en una camada aprenden a controlar las mordeduras y los rasguños como parte de su socialización con otros gatos. La agresión en el juego generalmente se observa en gatos que fueron destetados a temprana edad, así como en gatos poco sociables y aquellos sin actividad. El comportamiento puede continuar hasta la edad adulta y se observa con mayor frecuencia en hogares con un solo gato, debido a que pasan mucho tiempo sin compañía.

Una manera de detener el comportamiento agresivo es aumentar la cantidad de interacción con tu gato. Asegúrate de tener a la mano diferentes juguetes para tu gato y de captar su atención con su juguete favorito por períodos cortos, varias veces al día.

Los juguetes interactivos deben estar separados de ti, para limitar la posibilidad de que el gato pueda rasguñarte o morderte. Acércate con calma y háblale de manera relajada. El tiempo de juego debe ser divertido y desafiante, pero no brusco. El juego rudo es inapropiado con los gatos, en especial con los agresivos.

Lo más recomendable es ofrecerle muchas superficies para rascarse, como postes para escalar y perchas, para que pueda realizar su conducta natural de rascarse, estirarse, trepar y escapar.

Agresión redirigida

La agresión redirigida ocurre cuando un gato no puede alcanzar lo que le molesta: su objetivo. Por ejemplo, tu gatito ve a otro gato afuera en su territorio, pero como está adentro, no tiene forma de confrontar al intruso. Y en ese momento, uno de sus compañeros felinos entra a la habitación y se acerca para saludarlo, y el gato lo ataca por frustración.

En este caso, tu mejor opción en esta situación es eliminar la fuente de la frustración agresiva de tu gato (por ejemplo, cubrir la ventana o limitar el acceso de tu gato a ella) y tomar medidas para asegurarte de que la situación no progrese a una agresión entre gatos, en la que el gatito compañero de casa se convierta en el objetivo sustituto de tiempo completo.

5 consejos de sentido común para controlar a un gato agresivo

1. Aprende a evitar los desencadenantes que pueden hacer que tu gatito se ponga agresivo. Por ejemplo, si es agresivo a la hora de comer, acomódalo en otra habitación mientras preparas sus comidas. Coloca su plato de comida en su lugar habitual y luego déjalo entrar al área para comer.
2. Observa los gestos de tu gato justo antes de ponerse agresivo. Algunos signos comunes son ojos entrecerrados, miradas furtivas hacia el irritante/objetivo, las orejas giradas hacia los lados y aplastadas contra la cabeza, y la cola contraída.
3. Considera entrenar a tu gato para que obedezca comandos para recibir cosas que valora. Con el incentivo adecuado (por lo general premios de comida), muchos gatos pueden ser entrenados con un clicker para realizar ciertos comportamientos, como sentarse.
4. Consulta a un veterinario integrativo u holístico sobre los suplementos naturales que podrían beneficiar a tu gato, incluidos los remedios homeopáticos y herbales, L-teanina, rodiola y pasiflora.
5. Si el problema de agresión de tu gato es grave y no puedes manejarlo por tu cuenta, habla con tu veterinario o consulta a un especialista en comportamiento animal que tienen experiencia con la agresión felina.

Enriquecimiento Ambiental

Hay varias medidas que puedes tomar para aliviar el estrés de los gatos de tu familia: