Constantemente hablo ampliamente sobre los beneficios de darles tiempo a los perros para explotar uno de sus instintos más naturales, como olfatear su entorno. Permitir que tu mejor amigo canino se deje llevar por su nariz es muy importante para su salud mental y, según los resultados de un estudio reciente, también puede ser muy beneficioso para su salud física.
El estudio fue realizado por un par de investigadores de ciencia ciudadana, Cristina y Aurélien Budzinski, quienes se describen a sí mismos como amantes de los perros y entrenadores certificados de perros en Francia. Ellos "promueven la observación de perros, así como los estudios de campo para comprenderlos más profundamente". Denominan a su estudio como "At the heart of the walk", y este revela algunas percepciones fascinantes sobre lo que ocurre en el cuerpo de los perros durante las caminatas.
Cuanto más intenso sea el proceso de olfateo de los perros, más baja será su frecuencia cardíaca
En el estudio de Cristina y Aurélien Budzinski participaron 61 perros, entre ellos cachorros, adultos y adultos de edad avanzada. En total, fueron 37 machos y 24 hembras. La mayoría de los machos adultos no estaban castrados, y la mayoría de las hembras adultas estaban esterilizadas. Eran 14 perros de tamaño pequeño, 17 medianos y 30 grandes, desde chihuahuas hasta un mastín italiano.
Cada perro hizo una caminata durante 5 minutos con correa corta (de 5 pies), 5 minutos con correa larga (de 16 pies, tipo plana, que no era retráctil), y 5 minutos sin correa. El orden de las caminatas fue aleatorio, y la frecuencia cardíaca de los perros fue monitoreada en cada caminata.
Los datos que los investigadores recopilaron durante las caminatas fueron reveladores:
- Aunque los perros tenían la correa corta, olfatearon durante un promedio de 37 segundos
- Cuando los perros llevaban una correa larga, olfatearon durante un promedio de 103 segundos, que representa 280 % más
- Cuando no llevaban correa, el tiempo promedio de olfateo fue de 119 segundos, lo que representa 330 % más durante el tiempo de olfateo, en comparación con la correa corta
- Durante el lapso de olfateo los perros redujeron su frecuencia cardíaca, incluso cuando caminaban
- Cuanto más olfateaban, más baja era su frecuencia cardíaca
Estos resultados ocurrieron en todos los perros, independientemente de su edad, tamaño o sexo; si caminaban todos los días o casi nunca caminaban; y si jalaban o no la correa.
Los perros podrían sacudir sus cuerpos para disminuir su frecuencia cardíaca
Lo curioso es que, la pareja de investigadores también midió la frecuencia cardíaca de los perros mientras realizaban otro típico comportamiento canino, en especial cuando estaban mojados, denominado como "sacudirse". Todos los perros sacudieron sus cuerpos durante sus caminatas de 5 minutos, y lo hicieron con mayor frecuencia cuando su frecuencia cardíaca era más elevada. Al "sacudirse" disminuyeron su frecuencia cardíaca. Algunas estadísticas establecen que:
- Durante los 15 minutos de caminata, el 80 % de los perros se sacudió, y casi todos sacudieron sus cuerpos antes, durante y después de las caminatas
- Los perros se sacudieron con mayor frecuencia cuando tenían la correa larga, en comparación con la correa corta, o al estar sin correa
- Hubo un total de 165 sacudidas con una duración promedio de 2 segundos
- El menor promedio en la frecuencia cardíaca fue del 12 %
Sin estos estudios, es probable que a la mayoría de dueños nunca se le ocurriría que estas sacudidas que observamos con frecuencia en realidad impulsan una respuesta fisiológica beneficiosa en nuestros compañeros caninos.
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¿Por qué los perros necesitan tener la libertad de olfatear?
Por naturaleza, los perros son olfateadores extraordinarios, y frecuentemente me pregunto si los dueños comprenden su necesidad de utilizar su nariz para explorar el entorno. Algunos dueños parecen tener tanta prisa, que no les permiten a sus mascotas olfatear el mundo que les rodea.
El conductista animal, Marc Bekoff, Ph.D. considera que existe la posibilidad de ocasionar una privación sensorial y estrés en los perros que no se les brinda suficientes oportunidades de olfatear:
"Si no se les permite olfatear podría generarles efectos adversos. Mi recomendación es permitirles olfatear; no restrinjamos una de sus conexiones vitales con el entorno. Debemos permitirles olfatear cuando llevan la correa, o caminen y jueguen con amigos y otras personas, así como dejarlos correr con libertad.
Como ya mencioné, impedirles utilizar su olfato y otros sentidos podría ser un tipo de privación sensorial que evita que puedan obtener los datos que necesitan para descubrir el mundo que les rodea. Cuando los perros no olfatean puede generarles estrés porque necesitan captar los olores y otro tipo de información para evaluar su entorno".
Una perspectiva muy diferente sobre las caminatas con tu perro
Muchos dueños tienden a percibir las caminatas con sus perros como una actividad rápida, y creo que esto se debe a que lo han convertido en una rutina, y también porque no analizan la cuestión desde la perspectiva de su mascota. La actividad de olfatear no solo podría ser divertida, sino que representa una necesidad, para que los perros puedan sentirse conectados con su entorno.
Hace poco, un investigador aplicó la siguiente analogía: para los perros, el olor es tan importante, como el sabor para los humanos. Desde luego que, podríamos obtener calorías en nuestros estómagos que no pasen por nuestras bocas (y papilas gustativas), pero eso ocasionaría que los alimentos fueran mucho menos agradables para nosotros. Lo mismo ocurre en los perros a los que se les niega la oportunidad de utilizar su olfato y recibir estimulación; su calidad de vida puede ser afectada de forma negativa.
Hay muchas medidas que puedes aplicar para convertir esta rutina en una actividad divertida que puedas disfrutar con tu mejor amigo de cuatro patas.
Diferentes tipos de caminatas con perros:
1. Caminatas intencionales. Por lo general, se trata de caminatas cortas con un objetivo específico, por ejemplo, sacar a tu perro a hacer sus necesidades.
2. Caminatas de entrenamiento. Estas caminatas pueden ser con el fin de mejorar sus modales cuando lleva su correa, aprender comandos básicos o avanzados de obediencia, socialización continua o cualquier otra cuestión que consideres puedas hacer en una caminata con correa. Asegúrate de llevar algunos premios saludables cuando realices este tipo de caminata. El entrenamiento continuo a lo largo de la vida de tu perro es una excelente manera de mantener el aprendizaje y el aburrimiento bajo control. También, es una forma maravillosa de fortalecer el vínculo con tu mascota.
3. Caminatas mentalmente estimulantes. La mayoría de los perros con correa no pasa tanto tiempo olfateando e investigando como quisieran, por lo que darle un lapso de tiempo para explorar podría ser una buena forma de estimulación mental para tu mascota. Estas caminatas le permiten detenerse, olfatear, investigar, así como enviar y captar mensajes. Los perros obtienen conocimiento de su entorno a través de su olfato.
4. Caminatas para explorar (sniffaris, en inglés). ¡Me encanta esta palabra! Este tipo de caminata es cuando tu perro toma la iniciativa, lo sigues y le dejas explorar y olfatear por donde quiera. Las caminatas conocidas como "sniffaris" son paseos mentalmente estimulantes pero mejorados, por así decirlo, ya que tu perro toma el control y decide dónde explorar y qué investigar.
5. Caminatas intensas. Las caminatas intensas ayudarán a mantener el cuerpo de tu perro fuerte y en su peso ideal, además le servirán para aliviar la artritis y otras enfermedades articulares degenerativas. Estas caminatas también pueden ser una excelente estrategia para garantizar que tu perro haga la cantidad de ejercicio que necesita, siempre y cuando seas constante.
Recuerda: un perro sano necesita hacer ejercicio durante al menos tres días a la semana (cada dos días es bueno, pero lo ideal sería hacerlo todos los días) a una intensidad que eleve su frecuencia cardíaca durante 20 minutos, con el fin de mantener una buena salud cardiovascular y tono muscular. Si tu perro no tiene buena condición física, tendrás que comenzar poco a poco, hasta llegar a los 20 minutos de caminata intensa.
6. Caminatas con amigos. Si tu perro se siente cómodo con otros perros, considera reunirte con vecinos o amigos con perros para paseos grupales. Cualquiera que tenga dos piernas o cuatro patas puede acompañarte a socializar y ejercitarse al mismo tiempo, los otros dueños pueden ser una excelente fuente de información para ti y tu perro.
7. Caminatas con paseadores diferentes. Todo el mundo pasea a un perro de manera un poco diferente, por lo tanto, mientras más miembros de tu hogar paseen a tu perro, tendrá más experiencias diferentes. Y como las caminatas bien hechas constituyen experiencias para crear un vínculo, todos los miembros de la familia pueden pasar tiempo con el perro.
Si trabajas todo el día, puedes contratar a un paseador profesional de perros un par de veces a la semana, o bien pedírselo a un amigo o vecino.
8. Caminatas por diferentes lugares. En vez de siempre caminar por la misma ruta, toma a tu perro y dirígete hacia otro lugar, parque o camino. Ambos estarán en un entorno diferente con experiencias, imágenes y olores nuevos.
Conclusión: no todas las caminatas que realizas con tu perro tienen el objetivo de explotar su sentido del olfato, pero al menos una vez al día, ¡debes dejar que tu mejor amigo olfateé todo lo que quiera y se sienta bien al ayudarle disminuir su frecuencia cardíaca mientras realiza sus comportamientos caninos!