La babesiosis es una enfermedad causada por la parasito babesia intracelular. La infección es relativamente común en los perros, pero no en los gatos domésticos en Estados Unidos.
Los perros frecuentemente están más expuestos a los parásitos a través de una mordida o una garrapata infectada, pero la transmisión podría presentarse a través de la transferencia de sangre de una mordida de un perro, trasfusión sanguínea o en la placenta de una madre que infecta a sus cachorros.
Cuando la babesiosis es una infección transmitida por garrapatas, no es raro que un perro afectado tenga infecciones adicionales transmitidas por garrapata incluyendo ehrlichiosis, fiebre de la montaña rocosa y otras. Estas infecciones pueden interactuar, agudizando una con la otra. Los perros que pasan mucho tiempo en el exterior, especialmente en las zonas arboladas tiene mayor riesgo a ser mordidos por garrapatas o a las infecciones transmitidas por garrapatas como la babesiosis, especialmente durante los meses de verano cuando las poblaciones de garrapata son muy elevadas.
Los perros jóvenes tienden a sufrir síntomas más serios, y los Galgos, Pit Bull Terriers, y el Staffordshire Americano parecen ser los más susceptibles que otras razas.
La mayoría de los casos caninos de babesiosis en la parte sur de Estados Unidos, la enfermedad también se ha reportado en Massachusetts, Pennsylvania, and New Jersey.
Síntomas de la Infección por Babesia
El periodo de incubación entre la exposición del parasito y los síntomas es aproximadamente dos semanas. Una infección por babesia podría incluso no tener síntomas o en algunos casos muy ligeros o hasta muy severos. Los parásitos de babesia se multiplican en el cuerpo del perro, lo que podría causar ictericia al igual que anemia, incluyendo anemia hemolítica inmunomediada.
Además de destruir los glóbulos rojos y causar anemia, la inflamación severa que se puede presentar con babesiosis puede ser abrumadora y completamente adicional a la anemia. La coagulación de la sangre puede ser afectada y podrían presentarse una amplia variedad de síntomas cuando el parasito invade el sistema nervioso central. En casos severos, podría presentarse daño en los pulmones y también la enfermedad hepática.
Los síntomas severos dependen de las especies de los parásitos involucrados en la capacidad del sistema inmunológico del perro para combatirla. Las cepas de la babesia reportadas en los Estados Unidos parecen causar formas más ligeras de la enfermedad que otras cepas encontradas en otras partes del mundo.
Los síntomas pueden aparecer y desaparecer de la nada mientras la enfermedad sigue su curso y puede incluir carencia de energía, falta de apetito, debilidad, fiebre, encías y lengua pálida, orina de color roja o amarilla, heces descoloridas, pérdida de peso, ganglios linfáticos agrandados, agrandamiento del bazo e ictericia, que provoca un color amarillento en los pulmones, tracto gastrointestinal, riñones y sistema nervioso.
Diagnóstico de la Babesiosis Canina
El diagnóstico de la Babesiosis canina puede ser bastante complicado. Su veterinario se enfocara en su historial para identificar cualquier posible incidente que haya expuesto a su perro a la infección del parasito. Y además de la examinación física, también realizara un perfil de química sanguínea, un conteo total de los glóbulos (CBC) y un análisis de sangre.
Su veterinario también podría utilizar una mancha de Wright para la examinación microscópica de la muestra de sangre. La prueba de anticuerpos inmunofluorescentes (IFA) también puede realizarse, pero por lo general es muy difícil diferenciar entre las especies y subespecies del parasito de la babesia con la prueba IFA. Además, en algunos perros infectados, en particular los perros jóvenes, es posible que no se les pueda detectar la presencia de anticuerpos.
La prueba de Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR) para detectar la presencia de babesia en el ADN en muestras biológicas puede ser diferente entre las especies y subespecies y es más sensible que otros métodos de prueba. Mientras que ciertos laboratorios realizan la prueba de PCR, en realidad esta prueba es el mejor método para confirmar cualquier infección por babesia.
Publicidad
![Clic aquí para aprende más]()
![Clic aquí para aprende más]()
Consejos Para el Tratamiento y Prevención
Un perro severamente enfermo, especialmente uno que requiera terapia con fluidos o transfusiones sanguíneas, debe ser hospitalizado rápidamente. Desafortunadamente, los medicamentos utilizados para curar la babesiosis no siempre son eficaces y podrían tener serios efectos secundarios. En perros asintomáticos, no vale la pena aventurarse con los medicamentos.
Además, la terapia con medicamentos a menudo desata los síntomas de la infección pero en realidad no limpia los parásitos del sistema del perro. El perro puede permanecer infectado y la infección puede propagarse durante los periodos de estrés o desequilibrio inmunológico.
A perros severamente enfermos e infectados les he dado varias hierbas y nutraceuticals, incluyendo los beta-glucanos, hongos medicinales (shiitake, mitake, y reishi), curcumina, hoja de olivo y uña de gato. Si es posible, también recomendaría la terapia de oxigeno hiperbárico.
Si su perro pasa en áreas que son propensas a tener garrapatas, la prevención sin duda es la mejor manera de evitar que esto se desarrolle. Revise diariamente a su perro para identificar cualquier presencia de garrapatas y quíteselas cuidadosamente. Una garrapata tiene que ser alimentada por tres días para infectar al perro con babesia, por lo que entre más tiempo este en el cuerpo de su perro, mayor será el riesgo de transmisión por parasito.
Si su perro no está actuando normal y ha estado expuesto a las garrapatas, pregúntele a su veterinario sobre una posible infección con la enfermedad transmitida por garrapatas. En mi opinión, las infecciones transmitidas por garrapatas son responsables de muchas otras enfermedades que no son detectadas por los veterinarios y podría ser la razón de que su perro no se esté sintiendo bien.