Como los humanos, los perros pueden desarrollar problemas de audición o sordera. Algunos nacen parcial o totalmente sordos, mientras que otros sufren pérdida de audición como resultado del envejecimiento, inflamación o enfermedad.
Al igual que en los humanos, los ruidos fuertes podrían dañar las delicadas estructuras del oído medio e interno de los perros. Es importante que los dueños de perros, los cuidadores y los veterinarios comprendan el daño que los ruidos fuertes pueden causan a la audición de los animales.
Pérdida auditiva por ruidos fuertes
En un informe publicado en Topics in Companion Animal Medicine, investigadores de la Universidad de Illinois, en Urbana-Champaign, describen casos de pérdida auditiva en tres perros de trabajo: un perro policía, un perro rastreador y un perro de caza. Los exámenes físicos y neurológicos no revelaron hallazgos significativos, sin embargo, las pruebas auditivas indicaron sordera en ambos oídos.
Un perro estaba sordo de manera permanente, pero pudo continuar trabajando con la ayuda de señales manuales. Un segundo perro recibió suplementos de complejo B, vitamina E (400 UI diarias) y N-acetilcistina (600 mg diarios) y recuperó su audición dos meses después. El tercer perro no regresó para recibir un seguimiento.
De acuerdo con la coautora del informe, la Dra. Kari Foss, neuróloga veterinaria y profesora de medicina clínica veterinaria en la Universidad de Illinois, estos estudios indican que los dueños y cuidadores "deben comprender los efectos de la proximidad a los ruidos fuertes y tratar de proteger su audición".
"La pérdida de audición causada por el ruido es el resultado de daños a las células ciliadas de la cóclea que vibran como respuesta a las ondas sonoras", dijo Foss. "Sin embargo, el ruido extremo también podría dañar el tímpano y los huesos pequeños dentro del oído interno, conocidos como huesecillos".
Causas adicionales de la pérdida auditiva
Otra causa es un problema conductivo en el que las ondas sonoras no alcanzan los nervios del oído. Esto puede ser causado por la inflamación del oído externo u otro problema del canal auditivo, como daños en el tímpano, tumores o un estrechamiento del canal auditivo. Los problemas conductivos también pueden ser causados por la inflamación del oído medio.
Otra causa afecta los nervios del oído y puede incluir cambios degenerativos, trastornos anatómicos como un problema con el desarrollo de la parte que contiene receptores nerviosos, tumores o cáncer de los nervios, así como enfermedades inflamatorias e infecciosas del oído medio o interno, y traumatismos.
Ciertas toxinas y medicamentos también pueden afectar la audición en las mascotas, incluyendo los metales pesados como el arsénico, el plomo o el mercurio; ciertos antibióticos; antisépticos y otros productos que se utilizan para descomponer la cera del canal auditivo; diuréticos que eliminan el exceso de líquido del cuerpo; y algunos agentes quimioterapéuticos. Otra causa de pérdida auditiva es la inflamación crónica a largo plazo del oído interno, medio o externo, por lo general causada por infecciones de oído que no se tratan.
Las señales de pérdida auditiva en perros incluyen:
- No responder cuando se le llama
- Conciliar el sueño con sonidos que alguna vez lo despertaban
- Desconcertarse por ruidos fuertes que no le molestaban antes
- Ladrar mucho o hacer sonidos inusuales
Los perros que pierden la audición en un oído a menudo pueden responder a los comandos, pero se les dificulta localizar la fuente de un sonido. Es importante comprender que los perros con sordera o con problemas de audición no reconocen posibles amenazas en su entorno.
“Son vulnerables a peligros, como vehículos o depredadores, por lo que deben monitorearse cuando no estén en casa”, dijo Foss.
Es importante que programes una cita con el veterinario si crees que tu perro está lidiando con esta situación. Muchas causas, como infección, inflamación o pólipos, pueden tratarse y, a menudo, resolverse.
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Opciones de tratamiento
Por desgracia, la sordera congénita es irreversible y permanente. Sin embargo, si la pérdida auditiva es causada por inflamación, a menudo existen intervenciones médicas o quirúrgicas que pueden ayudar. El éxito del tratamiento dependerá de que tan extendida está la enfermedad que causa la sordera, así como de los resultados del cultivo bacteriano y de las pruebas de sensibilidad, y las radiografías o tomografías computarizadas (TC).
Los problemas conductivos a veces mejoran cuando se trata la inflamación del oído. Lo creas o no, también hay audífonos para perros (y gatos) que en ocasiones son buenos. Si la pérdida auditiva es tratable, es importante contar con la ayuda de un veterinario hasta que se resuelva la causa subyacente. Para la sordera congénita u otro tipo de pérdida auditiva irreversible, existen cosas que pueden ayudarlo a vivir una vida segura y feliz.
Por ejemplo, es importante acercarse a un perro dormido o que está de espaldas con cuidado. Es necesario que sepa que estás ahí para reducir la posibilidad de asustarlo. Por lo tanto, si la forma de comunicarte con tu perro es al tocarlo, tienes que acercarte con cuidado. Te recomiendo soplarle un poco de aire para que sepa que estás cerca, antes de tocarlo. Puedes ponerle una pequeña campana en el cuello para que puedas localizarlo fácilmente.
Tienes que tener mucho cuidado cuando esté al aire libre, porque no escuchará los peligros, sin importar cuales sean. Tu mascota debe estar atada en todo momento a menos que esté en un área segura como un jardín cercado.
La mayoría de los perros con sordera pueden adaptarse muy fácilmente a las señales manuales. Las señales manuales y el contacto visual se convierten en herramientas de comunicación muy importantes para las mascotas con problemas auditivos. La mayoría de los perros se pueden entrenar para reconocer las señales manuales para venir y esperar.