La fascinante manera en que cambia la personalidad de tu perro con el paso del tiempo

cambios en la personalidad canina

Historia en Breve

  • Un estudio reciente sobre dueños de perros sugiere que, al igual que los humanos, las personalidades de los canes cambian de forma significativa, con el paso del tiempo
  • Entre los hallazgos más importantes se encuentra que la capacidad de respuesta de los perros al entrenamiento aumenta de manera constante a partir de que es un cachorro, donde los puntos más álgidos se encuentran a los 6 u 8 años de edad, y luego comienza un descenso gradual durante el cual todavía es posible "enseñarle nuevos trucos a un perro viejo"
  • Los investigadores también encontraron que las clases de obediencia se relacionan con rasgos de personalidad más positivos a lo largo de la vida de un perro
  • Es importante que los dueños de perros sean conscientes y se preparen no solo para los cambios físicos que vienen con el envejecimiento, sino también para los posibles cambios de comportamiento

La investigación sobre la relación entre los perros y sus humanos sigue revelando perspectivas fascinantes. Muy recientemente, un estudio publicado por la Universidad Estatal de Michigan (MSU, por sus siglas en inglés) sugiere que las personalidades de los perros cambian con el paso del tiempo y, además, nuestras interacciones con ellos desempeñan un papel en estos cambios graduales.

“Cuando los humanos pasan por grandes cambios en la vida, sus rasgos de personalidad pueden modificarse. Descubrimos que esto también sucede con los perros, y en un grado sorprendentemente elevado", explicó William Chopik, profesor de psicología y autor principal del estudio, en un comunicado de prensa de MSU.

"Esperábamos que las personalidades de los perros fueran bastante estables porque no experimentan los drásticos cambios de estilo de vida que tienen los humanos, pero en realidad cambian mucho". Descubrimos similitudes con sus dueños, el momento óptimo para el entrenamiento e incluso un momento en sus vidas en que podrían ser más agresivos con otros animales".

El estudio más grande hasta la fecha analiza los cambios en las personalidades de los perros a lo largo del tiempo

El estudio, publicado en el Journal of Research in Personality, es de los pioneros, y es el más grande que se ha realizado hasta la fecha con el fin de evaluar los cambios de personalidades en los perros. Los investigadores desarrollaron una amplia encuesta que incluía preguntas sobre las personalidades de los perros y su historial de comportamiento.

La encuesta fue respondida por los propietarios de más de 1 600 perros de 50 razas distintas, con edades que iban desde unas cuantas semanas a los 15 años, incluyendo una cantidad similar de machos y hembras.

Las preguntas de la encuesta incorporaron cinco aspectos de la personalidad canina: Temor, agresividad hacia las personas, agresividad hacia los animales, actividad o excitabilidad y capacidad de respuesta al entrenamiento. Los propietarios también respondieron una encuesta sobre sus propias personalidades.

Información importante: Las clases de obediencia se relacionan con rasgos de personalidad más positivos a lo largo de la vida de un perro

Los investigadores descubrieron, como era de esperarse, que los perros más jóvenes son más activos y excitables en comparación con los perros más viejos, y la disminución en el nivel de actividad ocurre de manera gradual y constante a lo largo de la vida del can.

El rasgo de la agresividad hacia las personas y otros animales alcanza su punto máximo de los seis a ocho años, y tanto los perros más jóvenes como los más viejos exhiben niveles más bajos en ambos tipos de agresividad.

Cuando se trata de la capacidad de respuesta al entrenamiento, los investigadores encontraron que el rasgo aumenta de manera constante desde que son cachorros y alcanza su máximo entre las edades de 6 y 8 años, momento en el que comienza a disminuir gradualmente. Sin embargo, la disminución no se produce más rápido que el aumento desde que es cachorro hasta la mediana edad, lo que sugiere que en realidad sí es posible "enseñarle nuevos trucos a un perro viejo".

De acuerdo con los investigadores, un rasgo de la personalidad que rara vez cambia a medida que un perro envejece, es el miedo y la ansiedad. Sin embargo, también informan que los perros expuestos a clases de obediencia tienden a ser menos temerosos en general.

“Exponerlos a clases de obediencia se relaciona con rasgos de personalidad más positivos a lo largo de la vida del perro”, dijo Chopik. "Esto nos brinda interesantes oportunidades de examinar por qué la personalidad cambia en todo tipo de animales".

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Los propietarios extrovertidos y agradables califican a sus perros de manera más positiva

Dado que el estudio de la Universidad Estatal de Michigan (MSU) evaluó los rasgos de personalidad de los perros que no son compartidos por los humanos, en mi opinión, las observaciones de los investigadores de cómo los "perros se parecen a sus dueños" no son especialmente ilustrativas o útiles. Del comunicado de prensa de MSU:

“Los humanos extrovertidos calificaron a sus perros como más excitables y activos, mientras que los propietarios con más emociones negativas calificaron a sus perros como más temerosos, activos y menos receptivos al entrenamiento. Los propietarios que se consideraron agradables calificaron a sus perros como menos temerosos y agresivos con las personas y animales”.

Como lo señala el Dr. Stanley Coren, autor y experto en comportamiento de perros, en su blog Canine Corner en Psychology Today, los perros y los humanos comparten al menos cuatro rasgos de personalidad (simpatía, extraversión, apertura y neuroticismo), y con suerte, los futuros investigadores analizarán esos rasgos en los perros para ver si cambian con la edad, así como ocurre en los humanos.

8 Maneras en que el comportamiento de tu perro podría cambiar a medida que envejece

La mayoría de los dueños de mascotas son conscientes de que su perro cambiará físicamente a medida que avance en años, pero muchos no están preparados para los cambios de comportamiento que podrían acompañar al envejecimiento.

No hace falta decir que debes discutir con el veterinario, cualquier cambio en el comportamiento normal de tu mascota, porque los animales a menudo expresan problemas físicos subyacentes a través de un cambio de conducta. Por ejemplo, los dolores de cadera o espalda pueden provocar uno o más de los comportamientos que se enlistan a continuación.

1. Agresividad — Además de la disminución de la capacidad auditiva, visual y del sentido del olfato, debido a la edad, tu perro podría sobresaltarse con más facilidad, y en algunos perros, esto puede causar agresión sin provocación alguna. La situación requerirá cierta investigación de tu parte, con ayuda del veterinario, para encontrar las causas específicas o los detonadores de tal comportamiento, con el fin de poder implementar algún tratamiento o protocolo para su modificación. 

Inscribirlo en clases de entrenamiento positivo (obediencia, olfateo, agilidad, etc.) dentro del marco de los 8 años, cuando el comportamiento agresivo puede alcanzar su punto máximo es una excelente manera de ayudar a mantener las interacciones de un perro con otros humanos y animales de manera controlada, positiva y orientada a las relaciones.

Los cambios significativos en el comportamiento también podrían requerir la ayuda de un conductista veterinario, y te exhorto a que te comuniques con uno lo antes posible si tu perro de edad avanzada presenta episodios de comportamiento agresivo sin provocación.

2. Ansiedad — Los perros propensos a la ansiedad tanto de jóvenes como de adultos (por ejemplo, aquellos con fobias al ruido o ansiedad por separación) a menudo se vuelven más ansiosos a medida que envejecen.

El entrenamiento de refuerzo positivo podría ser útil para frenar el comportamiento relacionado con la ansiedad en tu perro, y sin duda no puede hacerle daño mientras no te centres demasiado en los resultados. Es importante notar que, así como durante años has enfrentado cierto nivel de ansiedad en tu mascota, debes esperar y planificar la intensificación de esos problemas a medida que envejece.

Te reitero, las clases divertidas donde pueda socializar son una excelente manera de ayudar a controlar las conductas basadas en la ansiedad y generar confianza.

3. Destructividad — Por desgracia, algunos perros se vuelven destructivos a medida que envejecen, una situación que puede ser bastante perturbadora para los miembros de la familia. Es posible que pierdas una o dos de tus preciadas pertenencias durante esta etapa de la vida de tu mascota, o también podría volcar sus impulsos destructivos hacia sí mismo.

Algunos perros de edad avanzada desarrollan pica (comer objetos que no son alimentos) por primera vez. Otros parecen tener el impulso de lamer, chupar o masticar sus propias partes del cuerpo, las de otros miembros de la familia u objetos del hogar. Excavar y rascarse también puede convertirse en un problema. Muchos de estos comportamientos pueden basarse en el aburrimiento, por lo que es muy importante enriquecer su entorno todos los días y de manera constante.

Una vez más, es importante hablar con el veterinario sobre cualquier tendencia destructiva que desarrolle tu perro para descartar una causa física subyacente. Mientras tanto, deberás proteger tu hogar y pertenencias, y asegurarte de que tu mascota tenga suficientes huesos crudos y masticables adecuados para roer, pero solo si estás cerca para supervisarlo.

4. Hipersensibilidad, miedos y fobias — Si tu mascota mayor padece de deterioro de la vista u oído, incluso tu propia casa puede convertirse en un lugar aterrador. Las mascotas se desarrollan mejor con una rutina y regularidad, y esto es especialmente cierto en los perros viejos que tienen problemas incluso para recorrer el entorno familiar.

Es importante que en esta etapa de vida de tu perro su alrededor se mantenga constante. No muevas arbitrariamente sus platos de comida y agua, su jaula, su cama o sus juguetes. Trata de evitar el reacomodo de los muebles de tu casa. La hora de comer y las salidas para hacer sus necesidades deben ser consistentes de un día a otro, así como el tiempo para hacer ejercicio y jugar.

Si tu perro se está volviendo más sensible a los sonidos de la casa o del vecindario, pon un poco de música de fondo o mantén encendida la televisión para opacar el ruido.

5. Evacuación inadecuada — Si tu perro adulto pareciera haber olvidado su entrenamiento para el hogar, existen varias causas posibles, ninguna de las cuales implica la desobediencia deliberada. Lo primero que hay que hacer es llevarlo al veterinario para descartar cualquier enfermedad subyacente. Una vez hecho esto, habrá que investigar otras posibles causas de la evacuación inadecuada, como la disminución de la movilidad, necesidad más frecuente de evacuar o un menor control de su vejiga o intestino.

Los primeros pasos que se pueden tomar para resolver el problema son: Sacarlo más frecuentemente para que evacúe, o implementar por primera vez (o volver a implementar) el uso de una jaula. También es importante reconocer la diferencia entre el goteo de orina, sobre el cual tu perro no tiene ningún control, sin importar cuántas veces salga y la micción .

6. Agitación nocturna — Algunos perros mayores desarrollan la incapacidad de dormir durante la noche. Los problemas relacionados con el envejecimiento que podrían ser la causa de este cambio en el comportamiento del perro son: Pérdida de visión u audición que afecta la calidad del sueño, necesidad de orinar más seguido, o una mayor respuesta a ruidos que antes no le molestaban.

Todos los perros, incluyendo a los maduros y ancianos, necesitan hacer el ejercicio apropiado para su edad y condición, todos los días. Si tu perro hace ejercicio a diario, intenta aumentar el tiempo que pasa jugando o caminando. Si no hace mucho ejercicio, comienza a aumentar su nivel de actividad diaria. El objetivo es cansarlo físicamente para que pueda dormir mejor durante la noche.

Si tu perro necesita salir a orinar a media noche y está saludable (confirmado por un veterinario), podría estar tomando demasiada agua antes de dormir. Intenta retirar su plato de agua después de la cena y asegúrate que salga a orinar justo antes de irte a la cama.

Permite que tu perro duerma en tu habitación. Dormir cerca de sus humanos debería ayudar a aliviar la ansiedad que contribuye a su agitación nocturna.

7. Comportamiento compulsivo — Son las conductas repetitivas que el perro realiza una y otra vez, sin ninguna razón aparente. Pueden incluir lamerse constantemente (por lo general en una parte específica del cuerpo, como una pata), lo que puede causar llagas. Otros comportamientos incluyen perseguir su cola de forma repetitiva, girar, saltar, caminar de un lado a otro, “morder el aire” y mirar fijamente al vacío.

Si un chequeo completo realizado por el veterinario no muestra ninguna causa médica para el comportamiento obsesivo de tu perro, podría estarlo haciendo para aliviar sensaciones de ansiedad o conflicto. Una forma de intentar romper el ciclo es, simplemente, detenerlo justo en cuanto comienza este tipo de conducta, al hablarle tranquilamente, acariciarlo o masajearlo.

Si el comportamiento obsesivo es potencialmente peligroso o dañino y no crees poder manejarlo por ti mismo, habla con un veterinario holístico o con un especialista del comportamiento animal.

8. Vocalización — La vocalización excesiva es más común en los gatos mayores que en los perros, pero si tu perro se ha vuelto más “hablador”, podría ser inquietante, ya que, como su protector, quisieras entender qué es lo que necesita.

El incremento de la vocalización podría ser causado por la desorientación provocada por el declive de sus funciones cognitivas. También podría significar que tu perro no escucha tan bien como antes, o que siente dolor.

Si el veterinario ha descartado cualquier condición médica subyacente, intenta entrenar a tu perro a responder a una ligera señal verbal como “silencio” o “shhh” y prémialo generosamente por sus esfuerzos. Sin embargo, ten en mente que es posible que no se dé cuenta de que está haciendo ruido, en cuyo caso no es probable que aprenda a callarse con una orden verbal. Si ese es el caso, solo deberás distraerlo cuando vocaliza hablándole en voz suave y tranquilizadora.

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