¿Le das comida enlatada a tu mascota? Es posible que suceda esto en tan solo 2 semanas

alimentos enlatados con bpa

Historia en Breve

  • Un estudio de 2017 concluyó que darles comida enlatada a los perros, incluso si es a corto plazo, ocasiona que se expongan mucho más al bisfenol A (BPA), el cual es una sustancia química de uso industrial
  • El BPA es un disruptor endocrino que se asocia con diversos problemas de salud tanto en las personas como en los animales
  • Los perros que participaron en el estudio presentaron niveles tres veces más altos de este compuesto después de dos semanas de consumir alimentos enlatados de dos marcas diferentes, los cuales son muy fáciles de conseguir
  • También sufrieron cambios metabólicos y alteraciones en el microbioma intestinal tras exponerse al BPA
  • No hay manera de saber con certeza si podemos confiar en la leyenda "sin BPA" en las etiquetas de los alimentos enlatados para perros, a menos que se le solicite a las empresas una validación de terceros

Esta es una advertencia para todas las personas que alimentan a su compañero canino con comida enlatada. Diversos investigadores de la Universidad de Missouri realizaron un estudio que se publicó en 2017 en la revista Science of the Total Environment, el cual indica que darle comida enlatada a los perros, incluso a corto plazo, ocasiona que sus niveles de BPA (bisfenol A) sean mucho más altos.

El bisfenol A se relaciona con problemas de salud graves

El bisfenol A se encuentra en una amplia gama de productos de uso doméstico, tales como biberones y botellas de agua de plástico duro, equipos deportivos y electrónicos, DVD y CD, dispositivos médicos y dentales, lentes, selladores y empastes dentales y papel térmico, que es el material con el que se elaboran los recibos de las tiendas. También se encuentra en las resinas epoxi que se utilizan para recubrir las latas de alimentos y bebidas.

El bisfenol A es un disruptor endocrino. Se trata de una sustancia química de uso industrial que, según Medical News Today, "… obstaculiza la producción, secreción, transporte, acción, función y eliminación de hormonas naturales".

El BPA tiene la capacidad de imitar a las hormonas del cuerpo, sobre todo al estrógeno, y la forma en que lo hace perjudica la salud tanto de las personas como de los animales. En las personas, la exposición al BPA se ha relacionado con:

  • Trastornos reproductivos, así como cáncer de mama en mujeres y disfunción eréctil en hombres
  • Enfermedades cardiovasculares, diabetes y anomalías en las enzimas hepáticas
  • Problemas de funcionamiento del cerebro, memoria y aprendizaje
  • Menor eficacia de las quimioterapias
  • Asma

Los niveles de BPA se triplicaron después de 2 semanas de comer alimentos enlatados

Para la mayoría de los animales y humanos, este tipo de exposición se produce a través de la alimentación. Existen muy pocas investigaciones sobre el BPA en los alimentos comerciales y cómo puede afectar la salud de los perros, así que los investigadores de la Universidad de Missouri se plantearon el objetivo de determinar si las concentraciones de BPA en la sangre de los perros podrían verse alteradas después de comer alimentos enlatados muy fáciles de conseguir en el mercado.

Asimismo, el equipo de investigación analizó si la exposición a este compuesto de los alimentos enlatados afectó las bacterias intestinales o causó cambios metabólicos.

El estudio se llevó a cabo a lo largo de dos semanas en 14 perros que solían comer croquetas y no padecían ningún problema de salud. A los cuidadores se les indicó que, durante esas dos semanas, evitaran usar utensilios y tazones de plástico para servir el alimento (ya que podrían contener BPA) y que no les dieran premios que se hubieran guardado en recipientes de dicho material.

Se seleccionaron dos alimentos enlatados para perros muy populares, de los cuales, uno indicaba en la etiqueta que no contenía BPA. Los participantes comieron uno de los dos durante el estudio y se les tomaron muestras de sangre y heces (para analizar el microbioma) antes y después del período de dos semanas. También se analizaron los niveles de BPA de las latas y del alimento que contenían.

Cheryl Rosenfeld, quien es la autora del estudio y profesora asociada de ciencias biomédicas en la Facultad de Medicina Veterinaria de MU e investigadora en el Centro de Ciencias de la Vida Bond, afirmó lo siguiente:

"Las primeras muestras de sangre de los perros del estudio, que tomamos como punto de referencia, presentaron niveles mínimos de BPA circulante. Sin embargo, la cantidad de este compuesto casi triplico después de consumir cualquiera de los dos alimentos enlatados a lo largo de dos semanas.

De igual forma, descubrimos una correlación entre el aumento de las concentraciones séricas de BPA y el microbioma intestinal, al igual que ciertos cambios metabólicos en los perros. Una cantidad de BPA más elevada también podría disminuir una bacteria que tiene la capacidad de metabolizar este compuesto y otras sustancias químicas en el ambiente".

En otras palabras, los perros tenían niveles bajos de BPA en la sangre al inicio del estudio, pero estos se triplicaron durante el período de dos semanas en que comieron los alimentos enlatados, lo cual incluye el que decía no contener BPA. El análisis demostró que sí contenía esta sustancia. No se dio a conocer ninguno de los alimentos para mascotas que se utilizaron en el estudio. Más información a continuación.

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La exposición al BPA ocasionó alteraciones en el microbioma intestinal

Además de presentar niveles más altos de BPA en la sangre, los perros sufrieron cambios metabólicos y alteraciones en las bacterias intestinales. La hipótesis de los investigadores es que el BPA eliminó una cepa de bacterias que ayuda a metabolizar tanto el compuesto en cuestión como otras sustancias químicas presentes en el ambiente que se relacionan con él.

mascotas exposición al BPA

Rosenfeld y su equipo evaluaron el BPA de las latas de comida para mascotas. De igual manera, analizaron si las alteraciones en las bacterias del intestino y los cambios metabólicos podrían tener alguna relación con la exposición al BPA de los alimentos enlatados. Crédito: Cheryl Rosenfeld

Los autores del estudio concluyeron que:

"Los perros comparten con nosotros el ambiente tanto interno como externo, así que pueden ayudarnos a identificar algunos problemas de salud que podríamos experimentar a causa del BPA y otros productos químicos. Estos descubrimientos también podrían ser relevantes para la vida silvestre tanto acuática como terrestre".

¿Los alimentos enlatados sin BPA para perros son un mito o una realidad?

Hace unos años, Susan Thixton, quien es mi colega, activista de alimentos para mascotas y fundadora del sitio web TruthAboutPetFood.com, publicó una lista de fabricantes de alimentos que aseguran que sus productos enlatados no contienen BPA. El estudio de la Universidad de Missouri incluyó un enlace a esta lista, así que podemos aproximarnos un poco a descubrir qué alimentos enlatados para perros "sin BPA" se usaron en el estudio. La respuesta se encuentra entre los 10 fabricantes a continuación:

Chicken Soup

Petropics

Merrick

Nutro

Weruva

Purina

Blue Buffalo

Iams/Eukanuba

Canidae/Felidae

Fromm

En caso de que estés alimentando a tu perro con comida enlatada de alguna de estas empresas, ahora sabes que es posible que contengan BPA. Por desgracia, no hay forma de saber con certeza cuáles son. Susan Thixton afirmó que:

"Cuando los fabricantes de alimentos para mascotas descubren lo que los consumidores no quieren en sus productos (en este caso, el BPA de las latas), es muy probable que algunos mientan al respecto. No hay mucho que podamos hacer, a menos que haya evidencia sólida del engaño (es decir, los resultados de un análisis).

Tal vez, una persona que gane la lotería podría iniciar un fondo para que se realicen análisis de los alimentos para mascotas (y un fondo de defensa legal porque es casi seguro que aquellos que resulten culpables se defiendan). Pero, hasta que esto suceda, no nos queda opción más que confiar en que el fabricante de alimentos de nuestra preferencia nos diga la verdad".

Si te preocupa que el bisfenol A esté presente en la comida enlatada que le das a tu perro, te sugiero que consideres sustituirla por una dieta a base de alimentos frescos que sea óptima en nutrientes: puedes prepararla en casa o adquirirla en el mercado. Hay muchas empresas transparentes de alimentos para mascotas que están sometiendo sus productos a pruebas preventivas de terceros para detectar contaminantes y disruptores endocrinos, tales como metales pesados, micotoxinas, glifosato y BPA. Recuerda que puedes solicitar información sobre los resultados a la empresa de tu preferencia.

No recomiendo que sustituyas los alimentos enlatados por croquetas para perros. En mi opinión, la mejor opción para las mascotas es llevar una dieta con alto contenido de humedad, así que recomiendo los alimentos liofilizados o deshidratados que se puedan hidratar de nuevo con agua o caldo.

Este tipo de alimentos se fabrican a temperaturas más bajas que las croquetas y la comida enlatada, así que tu mascota consumirá menos carcinógenos cada día y la cantidad será mucho menor que si consumiera alimentos procesados a altas temperaturas, los cuales se elaboran a base de ingredientes secos, no frescos.

En caso de que estés alimentando a tu perro con alimentos procesados, considera seguir un protocolo de desintoxicación intermitente. De igual manera, recomiendo usar tazones de acero inoxidable, vidrio o cerámica para servir el alimento y el agua, así que debes evitar todos los que sean de plástico.

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